Dos mayores de Cerdà recuperan su charla diaria en el banco, cumpliendo con las medidas de seguridad sanitarias. B. G.

Los pueblos de la Comunitat que resisten sin ningún caso a la segunda oleada del Covid-19

Residentes en estos municipios extreman las medidas e incluso han optado por no ir a la playa este verano para evitar brotes

B.o./A.D/B.G./A.T./Ó.d.

Miércoles, 30 de septiembre 2020, 00:22

Un total de 116 pequeños municipios de los 542 de la Comunitat continúan libres de coronavirus. Esta cifra se ha reducido en los últimos quince días ya que entonces eran 130 las poblaciones sin rastro de Covid-19. La mayoría son pueblos pequeños con una densidad de población baja, donde los vecinos se controlan unos a otros, extreman las medidas sanitarias para evitar contactos y han aprendido a no salir de la localidad sino es estrictamente necesario.

Publicidad

De norte a sur de la Comunitat y desde Zorita del Maestrazgo, Bejís, Castellfort, Culla, pasando por Alcublas, Castell de Guadalest, Quatretondeta, Gaianes, Llíber, Murla y Tormos, todos hasta más de un centenar de pueblos están exentos del virus en la actualidad.

Así están en Benicull, Beneixida y Sellent, en la Ribera. Aquí, según el médico de Benicull, «no hay ninguna receta mágica. Se han tomado las medidas desde el principio».

La plaza de Benicull es el lugar donde más vecinos se reúnen. A. T.

Lo mismo piensan los vecinos que se reúnen en el bar de la plaza. «Aquí somos pocos y nos conocemos todos, si hubiera un caso nos enteraríamos pronto y nos quedaríamos en casa», señala Pepe. Las calles de esta localidad están prácticamente desiertas y los pocos negocios que hay tampoco cuentan con una gran afluencia. Consuelo considera que el peligro puede estar durante los fines de semana, cuando acude al pueblo gente de otras localidades para almorzar o cenar en la plaza.

En Guardarmar de la Safor, Beniflà y Benifairó de Valldigna, en la Safor, la estampa es la misma, poblaciones de medio millar de personas con calles vacías, algún bar abierto, parroquianos a la hora del almuerzo y otros vecinos paseando o haciendo deporte solos.

Ese es el máximo trasiego que se ve, aunque se intenta hacer vida normal, como cuenta Anni Balaguer: «Llevamos una vida rutinaria. No renunciamos a vernos, pero todos llevamos un cuidado extremo». En Guardamar el punto de reunión es el bar del ayuntamiento de algunos de los 526 vecinos. «Mantenemos las distancias. Almorzamos con todas las medidas de seguridad e intentamos salir lo justo del pueblo, sólo si es estrictamente necesario», apostilla.

Publicidad

Esta vecina remarca que en la población no hay colegio, aunque sí infancia, que hacen uso de zonas verdes en la medida de lo posible. «En el pueblo se nota que todo el mundo va con mucho respeto. Hay mucha gente que no sale de casa o que no ha ido ni a la playa este verano, son conscientes de la seriedad del momento».

En Beniflà, población de 457 vecinos, se ve poca gente. Donde se dan cita algunas personas es en los paseos del entorno de la localidad, allí alguien hace algo de deporte o pasea a primera o última ahora.

Publicidad

Con 118 habitantes, Lloc Nou de la Corona es el único municipio de l'Horta libre de virus. Sus residentes dicen sentirse «muy tranquilos». Dos jubilados pasan las mañanas haciendo corrillo sentados en sillas ante las puertas de sus casas pero con distancia de seguridad y mascarilla.

«Antes nos reuníamos todos en un local que cedió el ayuntamiento o quedábamos en las casas pero ahora ya no podemos», explican con cierta nostalgia. Paco y Manolo, otros dos vecinos, reconocen que «solo venimos a dormir. Pasamos el día trabajando fuera de casa en otros municipios».

Publicidad

Por ello, los residentes son muy cuidadosos en sus hábitos porque «vive mucha gente mayor y ellos son más vulnerables». «Esperamos que esta situación se alargue hasta que acabe todo esto», comentan.

En Torrella, Vallés, La Granja de la Costera y Cerdà, la clave para que no haya casos puede estar en que son pequeños núcleos de poblacion y «al ser todos como una familia nos concienciarnos los unos a los otros para no bajar la guardia», explica el alcalde de Cerdà, José Luis Gijón. El edil también apunta tener el campo tan cerca donde poder salir a pasear sin riesgo, como otro punto a favor. No obstante, asegura que, si tuviera la fórmula, se la transmitiría al Ministerio.

Vecinos de Guardamar, junto al bar del Ayuntamiento. LP

En Cerdà no hay tiendas, panadería o pubs, donde pueda concentrarse gente. Los dos lugares donde se reúnen los vecinos es en el único bar que hay, que este lunes estaba cerrado, y en la iglesia.

Publicidad

En el establecimiento de hostelería, el aforo es incluso menor del permitido con el fin de guardar la mayor distancia posible; y en la iglesia, al ser pocos los feligreses, los sitios están marcados y las puertas, por ahora, abiertas. Francisco y José, han podido volver a charlar en el banco, eso sí con su mascarilla y guardando siempre la distancia de seguridad. «La verdad es que no hacemos nada especial, sólo cumplir con las normas básicas», explican. Lo que lamentan es la páralisis que hay.

La Vall d'Albaida es una de las comarcas valencianas con más municipios libres de coronavirus. De hecho, un total de 13 localidades son las que no han registrado ningún contagio entre sus vecinos.

Aeilo de Rugat, Atzeneta d'Albaida, con 1.250 habitantes, Beniatjar, Benissoda, Benisuera, Carrícola, Fontanars dels Alforins, Guadasséquies, Otos, El Palomar, Salem, Sempere y Terrateig, por el momento, han conseguido librarse de este virus y sus ciudadanos quieren seguir así.

Noticia Patrocinada

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad