Agresiones, amenazas, quebrantamientos de órdenes de alejamiento... La violencia machista es un problema creciente y con múltiples manifestaciones. Tanto víctimas como administraciones están de acuerdo ... en que la clave para abordarlo es la especialización de los profesionales, sin embargo la dotación actual del Gobierno de juzgados de violencia sobre la mujer se ha quedado muy pequeña para la magnitud del problema.
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Y esta escasez se plasma, con claridad, en la última memoria del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat (TSJCV). En el apartado correspondiente a las necesidades de ampliación de la planta judicial, los profesionales valencianos de la justicia demandan doce nuevos juzgados de violencia contra la mujer que deberían ser realidad entre este año y 2024.
Es decir, actualmente existen 16 cuando los jueces estiman que debería haber 28 para dar una respuesta judicial satisfactoria al problema. O, al menos, agilizarla y liberar así de tanta carga a los juzgados ordinarios que atienden los casos ante la falta de oficinas especializadas.
Según el listado de necesidades que refleja el TSJCV, la mayor diferencia entre la realidad y lo que sería deseable se produce en la provincia de Valencia. En ella existen actualmente siete juzgados especializados en la violencia machista, cuando el principal organismo judicial valenciano considera que deberían ser muchos más: 14. En concreto, urgen un quinto juzgado de violencia sobre la mujer para Valencia y las creaciones de los primeros especializados de este tipo en Alzira, Sueca, Sagunto, Llíria, Requena y Xàtiva, donde aún no hay ninguno.
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En Alicante, el panorama tampoco es muy alentador. Actualmente existen siete, pero entiende el TSJCV que deberían ampliarse con cuatro más. Y sitúa la necesidad de este modo: haría falta un tercero para la ciudad de Alicante, un segundo para Elche e implantar los primeros de violencia en Elda y Alcoy. Por último, en la provincia de Castellón hay sólo dos, uno en Castellón y otro en Vila-real, cuando los profesionales demandan que empiece a funcionar uno más en Vinaròs, según la memoria.
Consciente de que la creación inmediata de esos doce nuevos juzgados de violencia es una quimera, el TSJCV establece un grado de urgencias por años. Y en este 2022 estima que, al menos, deberían ser implantados en una primera fase los más prioritarios: el quinto de Valencia, el tercero de Alicante, el segundo de Elche, y los nuevos de Sueca y Alzira. En total, cinco. Sin embargo, llama la atención que ninguno de ellos se ha puesto en marcha todavía a pesar de haber transcurrido ya más de siete meses del año.
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Estas carencias se producen en una región que está a la cabeza de España en tasa de violencia de género, tal y como refleja la última estadística trimestral del Observatorio contra la Violencia de Género del Poder Judicial. La Comunitat presentaba en este periodo una tasa de 22'8 casos de violencia por cada 10.000 mujeres. Está 8 puntos por encima de la media nacional y sitúa nuestra región en la cúspide de la incidencia del problema junto con Baleares y Murcia, que son los únicos territorios que presentan índices más elevados.
En el primer trimestre de este año los juzgados valencianos tramitaron 6.149 denuncias de violencia de género, lo que supone un incremento de casi un 30% respecto al mismo periodo del año anterior. Es decir, hay casi 70 casos al día que acaban judicializados en nuestra región, de ahí la urgencia de especialización.
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