Los 5 electrodomésticos que no debes usar durante el periodo 'punta' de la nueva factura de la luz

El precio de la luz, más o menos, se establecía hasta junio con un precio de entre 11 y 15 céntimos el kWh, pero con la nueva factura oscilará entre los 7 céntimos del periodo más barato, hasta el pico que se establece en los 25 céntimos el kWh. Asignándolo a las tres franjas horarias, el periodo 'valle' tendrá un coste de entre 7 y 8 céntimos el kWh, el tramo 'llano' tiene un precio de entre 13 y 15 céntimos el kWh y en el tramo más caro, en la 'punta', el coste es de entre 22 y 25 céntimos el kWh. La clave es que el tramo de mayor precio es el de mayor consumo en el hogar, en el que más se utlizan los electrodomésticos que más electricidad consumen.

Un mismo consumo actual trasladado al periodo 'valle' sí significará pagar menos, pero la base de la optimización con la nueva factura de la luz es el de realizar un consume responsable. Es por ello, que atendiendo al consumo de cada electrodoméstico común, se pueden establecer una clasificación en tres niveles. Hay sorpresas: una nevera consume menos que un secador de pelo o plancha, aunque hay cinco electrodomésticos que ocupan el top de consumo, que son los que habría que evitar su uso en el periodo de más coste de la luz.

En el nivel más bajo de consumo se encuentran aquellos que no son de uso prolongado, sino de momentos puntuales. Así, el alumbrado de una vivienda está en este nivel, junto con un televisor, el ordenador, el cargador del móvil, la nevara y el microondas. En este último caso su consumo es bajo por darse en periodos de tiempo puntuales y controlados.

En el nivel dos, los que tienen un consumo intermedio, está la aspiradora, una sandwichera, un secador de pelo y las planchas tanto de pelo como de ropa. Pero en la cima del consumo se encuentran los 5 electrodomésticos más habituales y que se recomenda que su uso no se haga, de forma descontrolada, durante las horas fijadas como 'punta' en la nueva factura de la luz. El aire acondicionado es el electrodoméstico que más consume de la casa, por delante de horno, vitrocerámica, lavadora y lavavajillas. Todos coinciden en que necesitan generar calor para su funcionamiento.

Hay que tener en cuenta la distinción que se puede hacer con el calentador del agua, bien sea eléctrico o de gas. Si necesita de gas para su uso, el consumo de luz es escaso, ya que únicamente precisa de electricidad para generar la chispa para encender el calentador. Todo cambia con los eléctricos, que su consumo más prolongado puede representar un gasto extra en la nueva factura, y más atendiendo al periodo horario en el que se utiliza en una vivienda habitual. Por ejemplo, las duchas matinales previas a las 08 horas no se verían afectadas, pero aquellas que se realizan a partir de las 20 horas sí representarán un gasto desmedido. Este caso sirve de ejemplo para realizar los grandes consumos de electricidad fuera del periodo 'punta'.

Pero la solución no es sobrecargar el sistema con un uso desmedido en fin de semana, ya que por no gastar durante toda la semana se podría traducir en un coste más elevado del ahorro realizado durante la semana.

Pero el cambio no ha sido únicamente en el consumo, ya que con la nueva factura de la luz también se añade una variación en la potencia contratada. Hasta la fecha cada cliente tenía en su tarifa una cantidad fija que si se modificaba afectaba a todo el contrato. Desde este 1 de junio, el cliente podrá tener dos potencias diferentes. El periodo inicial es de 08 a 00 horas y el segundo es de 00 a 08 horas. El fin de semana, como con el consumo también es un tramo fijo de potencia.

Ahora la luz contratada está equilibrada en los dos periodos mencionados, pero el cliente podrá aumentar o rebajar la potencia atendiendo a sus necesidades específicas, aunque la potencia que se establezca entre las 00 y las 08 horas será la que se disponga para el fin de semana, por lo que si se reduce drásticamente no será suficiente para su uso habitual.