La Comunitat no ha desarrollado ni un parque eólico en los últimos tres años

¿Por qué en tres años? Porque es el tiempo que ha pasado desde que el Consell publicara el Decreto-ley 14/2020, de 7 de agosto, para acelerar la implantación de renovables. Uno de los objetivos de esta norma era desbloquear aspectos del Plan Eólico, puesto en marcha en 2001 por el gobierno del PP y que debido a varias irregularidades sufrió una parálisis en su ejecución. En concreto, este plan dividía el territorio de la Comunitat en quince zonas, de las cuales, sólo se ha desarrollado el 40%.

Ahora, en un contexto en el que la crisis energética ha sacudido a empresas y particulares, el sector valenciano ha vuelto a tomar cartas en el asunto para hacerse oír ante un Consell dividido por sus posturas respecto al despliegue de las renovables. La Asociación Valenciana de Empresas del Sector de la Energía (AVAESEN) acaba de constituir una comisión de energía eólica para erigirse como un interlocutor ante la Administración y trabajar activamente en el relanzamiento de esta tecnología que es totalmente nula en la región valenciana.

«Nos acercamos al cierre de la nuclear de Cofrentes y seguimos sin tener una alternativa renovable suficiente. Nos hemos olvidado de la energía eólica, cuando es necesaria porque se complementa con la fotovoltaica. Aún estamos a tiempo de relanzar esta tecnología y llegar a los objetivos si cambia la gestión», explica el portavoz de esta nueva mesa de trabajo, Guillermo Roth, de la empresa Statkraft, quien urge al Consell a revisar el Plan Eólico para «desbloquear» del todo su estado.

Y es que, a través de la Estrategia Valenciana de Cambio Climático y Energía 2030, el Consell se propuso alcanzar los 7.000 MW fotovoltaicos y 4.000 MW eólicos, unas cifras todavía muy lejanas teniendo en cuenta que de la primera tecnología hay instalados actualmente 423 MW y de eólica, un total de 1.255 MW, según los últimos datos de Red Eléctrica.

Dentro de la Comunitat, la provincia de Alicante no cuenta ni con un sólo aerogenerador instalado. Los datos contrastan con los de otras comunidades autónomas como Aragón o Castilla-La Mancha, que multiplican por cuatro la potencia instalada en la Comunitat, a pesar de que esta última tiene consumos sustancialmente mayores. Además, mientras que la Comunitat sólo genera el 14% de su energía mediante fuentes renovables, Aragón y Castilla-La Mancha alcanzan el 75% y el 62%, respectivamente. Con estos datos, la región valenciana está lejos de cumplir el objetivo que se había marcado la Unión Europea para 2020.

Según explica Roth, el potencial eólico de la Comunitat es de 9.000 MW, por lo que actualmente se aprovecha un 15% de esa capacidad. «El potencial podría ser incluso mayor, dado el despliegue fotovoltaico que se está produciendo que permite la hibridación y una mayor eficiencia de la generación de energía al aprovecharse infraestructuras», agrega.

Según el portavoz de la recién constituida comisión, el desarrollo de todo el potencial eólico supone una inversión de 2.745 millones de euros en la Comunitat, además de la creación de 13.725 empleos para la construcción de los parques y 658 empleos para su operación y mantenimiento. Según sus cálculos, generaría unos ingresos para los municipios donde se implanten de 510.040.840 de euros.