R.D
Martes, 6 de diciembre 2022, 00:37
Ciertas monedas que aparentemente tienen un valor bajo pueden alcanzar un coste muy superior. Los amantes de la numismática buscan ejemplos de monedas singulares que las convierten en especiales y aumentan su precio. Es el caso, por ejemplo, de distintas monedas de 10 céntimos que todavía se encuentran en circulación.
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Como indica el portal NoticiasTrabajo, estas monedas de 10 céntimos han sido acuñadas en distintos países europeos: Alemania, Francia, Países Bajos, Austria y Finlandia. Pero quién sabe si podrían caer en tus manos. La moneda alemana puede llegar a valer 900 euros, ya que un exceso de cobre y un error de fabricación en los bordes es lo que la convierte en especial. Fue fabricada en el país germano en 2002.
En el caso de la moneda de 10 céntimos de Francia, se trata de los primeros céntimos que se acuñaron en este país en 1999, justo antes de la entrada en vigor del euro, y por ellas se han pagado hasta 300 euros. Algo similar ocurre en Holanda, con unas monedas fabricadas en 1999 que han llegado a venderse por 185 euros.
En Austria fue acuñada en 2002, año en que entró en vigor el euro en este país. Se encuentran muy pocas monedas de este tipo por lo que su cotización llega a los 275 euros.
Porta el león con dos espadas tradicional del escudo oficial de la nación y es muy difícil de encontrar. Llegó también justo antes del euro y tiene un valor aproximado de 210 euros.
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