La multa de Hacienda que puede costarte hasta 50.000 euros

Hacienda cambió el pasado año sus estándares a la hora de considerar qué es una infracción, con la última modificación al límite del dinero en efectivo. Ahora, los movimientos con metálico no podrán superar los 1.000 euros de importe, una decisión que muestra el empeño de la Agencia Tributaria de luchar contra el fraude fiscal y acabar con la economía sumergida.

Para cumplir su objetivo, Hacienda impone multas muy elevadas para aquellos que se saltan las normas de fiscalidad. La Agencia Tributaria no le quita el ojo de encima a muy de cerca transacciones y cuentas dar con cualquier indicio que pueda denotar irregularidades al respecto, y las sanciones del departamento son especialmente duras en estos casos.

Por ello, los trabajadores autónomos tienen que estar muy al tanto de sus cuentas y tener a mano los justificantes de cada una de ellas, por si Hacienda solicita explicaciones sobre movimientos que considera sospechosos. Y es que una de las multas que la Agencia Tributaria puede poner a los autónomos es ejemplo de la dura lucha del departamento contra el fraude fiscal: hasta 50.000 euros de sanción por no comunicar los datos reales de contabilidad.

Para más detalle, lo que sanciona Hacienda en este caso es el hecho de tener instalado un software que posibilite la ocultación de los datos de contabilidad del usuario, sin prestar atención a si el ciudadano lo ha empleado o no para presentar sus cuentas. Porque para la Agencia Tributaria, basta con tenerlo para que sea considerado una infracción.

La Agencia Tributaria no tiene ni que revisar si el software ha sido usado o no, gracias a la ley antifraude. El apartado 21 del artículo 13 de la misma se establece que se puede sancionar con hasta 50.000 euros si se detecta «la tenencia de sistemas o programas informáticos o electrónicos que no estén debidamente certificados».

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