![El terrible augurio de Niño Becerra sobre las pensiones: «Serán ridículas y habrá que trabajar hasta que uno se muera»](https://s2.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2025/01/09/becerra-RmxuXqzjfmXc9SW3zKhZoeJ-1200x840@Las%20Provincias.png)
![El terrible augurio de Niño Becerra sobre las pensiones: «Serán ridículas y habrá que trabajar hasta que uno se muera»](https://s2.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2025/01/09/becerra-RmxuXqzjfmXc9SW3zKhZoeJ-1200x840@Las%20Provincias.png)
Secciones
Servicios
Destacamos
El economista catalán Santiago Niño Becerra, en el marco de la presentación de su último libro 'Diario del Crash', ha realizado un análisis pesimista sobre el futuro del sistema público de pensiones español. Según sus declaraciones, recogidas por Ibercaja Banco, el modelo actual de pensiones se diseñó en un contexto muy distinto al actual, con parámetros como una esperanza de vida alrededor de los 65 años, una sanidad económica, bajos niveles de desempleo y un crecimiento sostenido en los salarios y el gasto público. Sin embargo, Niño Becerra asegura que ninguno de esos parámetros se da ahora, «que el pleno empleo es un recuerdo, los salarios van a la baja y el Estado se irá haciendo cada vez más pequeño» lo que lleva a la conclusión de que el sistema «es insostenible».
De acuerdo con Niño Becerra, las consecuencias de esta situación serán devastadoras para las futuras generaciones. El economista vaticina que las pensiones se volverán «ridículas» y que será necesario trabajar prácticamente hasta el final de la vida para poder subsistir. En este escenario, augura que se formará una «sociedad participativa», donde los ayuntamientos asignarán tareas de prestación de servicios entre ciudadanos para garantizar una red de asistencia que supla la falta de recursos del sistema público.
Además, el experto señala que los fondos de pensiones, que podrían ser una alternativa, han perdido rentabilidad en los últimos años. Según su análisis, los beneficios que han generado estos fondos han sido únicamente fiscales, lo que los hace poco atractivos como solución a largo plazo.
El economista no solo critica el sistema de pensiones, sino también las proyecciones gubernamentales que, según él, ofrecen una imagen falsa de la recuperación económica. «Nos llevan engañando desde 2007», asegura Niño Becerra, refiriéndose a las promesas incumplidas y las previsiones poco realistas que, en su opinión, se utilizan para tranquilizar a la población.
Sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2014, el economista afirma que no son los presupuestos de una recuperación económica, como defendió el Gobierno en su momento, «sino los de un país pobre y sin expectativas». Niño Becerra considera que estas medidas solo buscan ganar tiempo, a la espera de que en Europa se configure un nuevo modelo económico que sustituya al que ha prevalecido desde la Segunda Guerra Mundial.
Este nuevo modelo, que según el autor se consolidará en un futuro cercano, estará marcado por una producción más reducida y optimizada, adaptada a una capacidad de consumo limitada. Este cambio, argumenta, implicará una profunda transformación económica, con un aumento del paro estructural en España que podría situarse entre el 12% y el 18%. Asimismo, el economista prevé que los contratos laborales se asemejarán cada vez más a los de obra y servicio, ajustándose a las necesidades puntuales de las grandes empresas.
Noticias relacionadas
En este contexto, Niño Becerra asegura que ya no será necesaria la clase media. Las economías nacionales estarán dominadas por grandes corporaciones y 'clusters' empresariales que ejercerán una influencia decisiva sin necesidad de recurrir a golpes de Estado, simplemente emitiendo indicaciones a los gobiernos.
De cara a los próximos años, el experto anticipa un periodo de calma relativa, durante el cual se consolidará este nuevo modelo económico. Sin embargo, advierte que, con su implementación, se reiniciará un proceso de destrucción de empleo que transformará profundamente el mercado laboral y la economía global. «La economía ya no será la ciencia que administra la abundancia, sino que será la que administra la escasez», concluye.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.