El fondo de inversión valenciano que lleva más de una década dando vida a las empresas del futuro

Para él, el año pasado fue una transición, porque atrás quedaba el modelo que les había llevado hasta el éxito y por delante florecía un futuro desafiante con un primer fondo de capital riesgo de 35 millones para seguir creciendo, pero sobre todo para seguir haciendo crecer a compañías de todos los sectores. Esa es la máxima de una marca cuyo principal objetivo es «facilitarle a los emprendedores los primeros años de su compañía». En 2023, Demium realizó 18 inversiones en empresas a las que facilitó un primer ticket de entre 100.000 y 500.000 euros.

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La velocidad en la toma de decisiones y la apuesta por el talento, sin importar de qué sector procede, son las dos claves del crecimiento de este proyecto, según su fundador. Respecto a lo primero, Jorge Dobón considera que «los competidores todavía no están acostumbrados a esta toma de decisión tan ágil», que en el caso de Demium se reduce a «apenas dos o tres semanas» desde que el proyecto entra en los planes de la compañía hasta que recibe la primera inversión. Es ahí donde entra en juego la segunda pieza del puzzle. «La diversificación es clave en nuestra estrategia de inversión y somos totalmente agnósticos en cuanto a la industria o el modelo de negocio. Lo que nos importa es la experiencia que el fundador de esa empresa tenga sobre las dinámicas de ese sector», explica Jorge Dobón en referencia al tipo de compañías a las que suele ir destinada su inversión.

Desde su creación, Demium ha dado alas a cerca de 300 compañías y espera poder seguir haciéndolo a pesar de las dificultades e incertidumbres que se generan en un sector como el financiero. A corto plazo, las perspectivas para 2024 son positivas, ya que en los tres primeros meses la compañía lleva «varias inversiones que se están ejecutando» y «un ritmo muy similar al del año pasado». Es a medio y largo plazo donde surgen mayores dudas, a pesar del éxito, en cierto modo inesperado, cosechado desde 2013: «Nunca me hubiera imaginado tener un fondo de inversión de 35 millones de euros, pero porque cuando tienes 23 años te parece una cifra obscena e inimaginable. Creo que ha llevado un camino muy diferente al que podía imaginar, pero también el futuro desde ahora me parece tan incierto como me parecía en 2013».

Con vistas a esos próximos años, Dobón cree que «los tipos de interés por encima del 4%» y la excesiva regulación del sector financiero hacen que sea «muy difícil» ver con optimismo el futuro: «Urge una desregulación drástica del sector financiero para poder planificar hacia el futuro los planes de cualquier compañía». Por el momento, Demium seguirá apostando únicamente por el talento nacional, aunque no se descarta que se vuelva a invertir en otros países de Europa, como ya hicieron desde el 2019 hasta el 20222.

Lo que sí que está claro es que la vida de Demium y la de otras tantas nuevas compañías que surjan a raíz de su financiación continuará forjándose en Valencia, donde cada vez surgen «nuevas empresas con un nivel de ambición muy superior al que podríamos encontrarnos hace diez años».