El panadero valenciano que compite con su panettone con los mejores del mundo

No es nada fácil elaborar el clásico navideño italiano, en el que Jesús Machi se ha especializado. «Cada año preparo cinco mil panettones, y todos pasan por mis manos», cuenta. De hecho, no delega en nadie su preparación, y cada tres horas tiene que trabajar la masa. «Disfruto con esta elaboración». De hecho, volvió satisfecho de Milán, aunque no pudo estar en el podio debido a que no llegó, por ocho gramos, al peso mínimo establecido en las bases del concurso. «Me restaron un 15% de la puntuación, pero el jurado valoró muy positivamente el panettone que presenté», explica Machi, contento además de que el premio haya ido a parar a Barcelona. «Hay muy buen nivel en España», asegura. De hecho, formaba parte del jurado uno de los pasteleros mundialmente reconocidos, el alicantino Paco Torreblanca. «Las normas para participar en la competición son muy estrictas, y los concursantes tienen que utilizar ingredientes italianos».

El panadero tiene muy claro cuál es el principal secreto para un buen panettone: «la masa madre. Hay que cuidarla como si fuera un hijo», asegura Machi, que se ha tomado como un reto personal que esos cinco mil panettones que vende cada fin de año salgan más o menos igual.

Machi no tuvo tiempo de practicar en casa antes de la competición, precisamente porque ha estado muy implicado en ayudar a los municipios afectados por la DANA a través de la organización World Central Kitchen de José Andrés. De hecho, habrá un panettone solidario donde el dinero recaudado irá a parar, a través del Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia, a aquellos profesionales que se han quedado sin negocio.