El Levante sigue intentando soltar lastre para aligerar la masa salarial de la plantilla y hacer hueco en el Fair Play Financiero que permita inscribir más fichajes. Así pues, pese a que la prioridad de la entidad granota era y sigue siendo escuchar ofertas por Giorgi Kochorashvili, uno de los que tiene todas las papeletas para abandonar la disciplina azulgrana es Dani Gómez.
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El delantero madrileño, que cumplirá precisamente 26 años mañana martes, está en plenas negociaciones para marcharse cedido al equipo vecino de la ciudad, el Valencia. Su deseo de jugar en Primera División se cumplirá si la operación se cristaliza en las próximas horas, como todo apunta que ocurrirá.
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Dani Gómez, que comparte agente con Rubén Baraja, recalaría en Mestalla en condición de cedido por una temporada, fórmula que permitiría al Levante liberarse de su salario al completo, que sería cubierto por el Valencia, que además se haría cargo de la amortización pendiente. Por tanto, el conjunto granota ganaría un margen de más de medio millón de euros de Fair Play Financiero, además de hacer hueco en la delantera, donde hay 'overbooking' con José Morales, Moha Bouldini y Carlos Espí.
El Valencia, por su parte, incorporaría a un delantero que si bien no ha brillado desde que llegó al Levante y que tampoco lo hizo en su cesión al Espanyol, sí es del agrado de Rubén Baraja, que ya lo entrenó en el Tenerife, donde mostró su mejor versión ganándose su traspaso al conjunto granota. Cabe recordar que el Real Madrid todavía posee el 50% de los derechos del jugador, por lo que si al final de la cesión se incluyese una opción de compra, el conjunto merengue recibiría la mitad del montante.
Las próximas horas serán cruciales para el devenir de la operación entre dos clubes históricamente rivales que en los últimos años mantienen buenas relaciones. No hay más que ver el traspaso de Pepelu, hace un año, o el hecho de que este mismo miércoles se disputará un partido amistoso de pretemporada en la Ciudad Deportiva de Paterna que enfrentará a ambos clubes. Las prisas del Levante por dar salida a un jugador que tiene uno de los salarios más elevados de la plantilla y que no ha rendido como se esperaba se juntan con la necesidad del Valencia de reforzar el ataque.
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Rubén Baraja no quiere un nuevo Roman Yaremchuk, que llegó casi como última opción al cierre del pasado verano. Es por ello que confía en Dani Gómez, un jugador que ya conoce y que sabe el potencial que tiene. No hay que olvidar que el delantero, antes de pasar por Orriols, era un canterano estrella del Real Madrid y fue internacional sub-21 con España, siendo dirigido por el actual seleccionador absoluto, Luis de la Fuente, que también confiaba mucho en su capacidad de desmarque, juego de espaldas y olfato goleador.
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