Los trabajadores de Bimbo consideran «irrisorias» las contraprestaciones por el cierre en El Verger

El inicio de las negociaciones entre la empresa Bimbo y los trabajadores ante el cierre de la fábrica de El Verger no han comenzado con buen pie. Así al menos lo han expresado los representantes de la plantilla este miércoles al finalizar el segundo encuentro que han mantenido esta semana. Según ha recalcado uno de los integrantes y presidente del comité de empresa, José González, las contraprestaciones que les ofrecen son «irrisorias».

La primera cita de la negociación tuvo lugar este martes por la tarde, pero fue de mero trámite. Allí la empresa le entregó a la delegación de los trabajadores un informe técnico, la memoria que recoge los motivos por lo que se cierra la fábrica y la documentación relativa a la recolocación, entre otros papeles.

Ha sido en el encuentro de hoy cuando Bimbo ha puesto sobre la mesa lo que ofrece a los empleados y la réplica de la plantilla. Los representantes de los trabajadores han propuesto que se mantenga abierta la fábrica de El Verger, con una línea nueva de producción si es necesario, o que se derive parte del trabajo de otras sedes. La empresa descarta este planteamiento. Es más, en la memoria presentada se incidía en que esas instalaciones están obsoletas y que resultaría muy caro ponerlas al día.

Desde la mercantil les han trasladado la opción de recolocar a la gente en otros centros de trabajo, el más cercano se encuentra en Paterna. Para quienes acepten eso pero no quieran cambiar de domicilio se plantearía un montante económico, que no se ha estipulado. A quienes no quieran eso, les ayudarían durante seis meses a buscar trabajo, «algo que nos parece insuficiente porque no hay garantía de que se encuentre empleo», ha apuntado González.

Pero el aspecto más controvertido sería la indemnización para aquellos empleados que no quieran recolocarse. La oferta es de una compensación económica de 20 días por año trabajado, con un tope máximo equivalente al salario de un año.

El presidente del comité ha lamentado este último aspecto. «Eso está muy lejos de nuestras expectativas», ha subrayado. Además ha añadido que no han replicado con una contraoferta.

En ese sentido, José González ha insistido en que los trabajadores mantienen su predisposición a negociar. Eso sí, «siempre que Bimbo mejore sus posiciones de salida» porque ahora distan mucho de lo que piden los afectados por el cierre.

Las conversaciones se reanudarán dentro de una semana, el próximo miércoles. Antes de que llegue ese momento, este mismo viernes, se reunirá el comité de empresa para ver qué van a hacer. Estudian llevar a cabo acciones de protesta. Entre ellas barajan una manifestación o una huelga. Lo que harán al final se decidirá allí.

Cabe recordar que la pasada semana los empleados recibieron como un jarro de agua fría la decisión de cerrar la planta de El Verger. El viernes González ya declaraba con enfado que «Bimbo nos ha buscado la ruina a 100 familias». Palabras que secundaban varios de sus compañeros afectados por esa medida tan drástica que les daba a conocer la empresa tras el fin de las fiestas navideñas.

Los trabajadores cuentan con el apoyo del municipio. El alcalde, Basili Salort, en nombre del Ayuntamiento y de la población, ha mostrado su más rotundo rechazo al cierre de esta “fábrica histórica para El Verger y la Marina Alta”. Según ha destacado, se trata de una mala noticia para la economía de la comarca.

En ese sentido, ha recalcado que se trata de “un drama con nombre y apellidos”. Por ese motivo, ha expresado el respaldo al comité de empresa en las negociaciones para intentar frenar lo inevitable o, al menos, conseguir las condiciones más ventajosas para los afectados.

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