Bravo se queda sin directora general de Justicia, la tercera renovación en cinco años

valenciA. La consellera de Justicia, Gabriela Bravo, se irá de vacaciones cuando acabe esta semana con un importante agujero en su equipo. En el Consell de mañana se dará cuenta de la marcha de Bárbara López, directora general de Justicia. Con ella se va su mano derecha, la subdirectora de ese mismo área, Aurora Majuelos.

La salida de López obedece a razones estrictamente personales según confirmaron a este periódico varias fuentes vinculadas a la conselleria. Su antecesora, Verónica López, dejó el cargo tras fuertes discrepancias con Bravo y solo dos años después de sustituir a Maria Àngels García Vidal, que se fue en 2017, momento en que la consellera aprovechó para dar salida también a Luis Felipe Martínez como subsecretario de Justicia, que fue sustituido por Bárbara López, que posteriormente también reemplazó a Verónica López. Se trata de un departamento con una de las rotaciones más rápidas del Consell en la etapa del Botánico, de tal modo que, tras su aprobación mañana, quien ocupe esta dirección general será el cuarto alto cargo en apenas cinco años.

El cese de López como alto cargo, y de Majuelos, que era su persona de estricta confianza, supone la pérdida de mando en plaza en una de las patas en las que se apoya la gestión de la conselleria. Esta dirección general es la encargada de garantizar la operativa de los juzgados valencianos, dotarles de material y abordar su mantenimiento. La marcha implica un nuevo cambio al frente de la dirección general y, además, acometer esa renovación con los juzgados desbordado por el material acumulado a causa del parón generado por la pandemia. Si mantener en funcionamiento las dependencias judiciales ya era un reto importante en tiempos normales, la llegada del coronavirus implica un sobreesfuerzo monumental. Bárbara López vuelve a su plaza en el Ayuntamiento de Picanya.

Recientemente, el equipo de Bravo también ha sufrido una baja, la de su jefe de gabinete. El economista Alberto Muiños ha aceptado una oferta para trabajar como asesor del nuevo presidente de la República Dominicana. Si bien en estos dos casos no ha trascendido ningún tipo de desavenencia, lo cierto es que el equipo de Bravo registra una importante volatilidad. La salida de Luis Felipe Martínez (había sido subdirector general de Ordenación y Política de Personal en el Ministerio de Sanidad y Consumo, secretario general de la Consellería de Administración Pública, director general del Servicio Valenciano de Salud, director general de la Función Pública, director general de Personal de la Consellería de Educación y Ciencia, además de Subdelegado del Gobierno en Valencia) fue acogida por asombro en buena parte del Consell. La relación de Verónica López con Bravo se deterioró paulatinamente. Ya sea por unas razones u otras, la Dirección General de Justicia se ha convertido en uno de los puestos más 'calientes' del Consell.