Secciones
Servicios
Destacamos
Francisco Camps se ha convertido de un tiempo a esta parte en el alborotador oficial del Partido Popular. El expresidente contraprogramó al aparato del PP y lo hizo, además, en casa de María José Catalá. Lo de menos, o mejor dicho, lo ... secundario, era el motivo -una reclamación a Ribó sobre el PAI del Grao- que le llevó hasta las puertas del Consistorio.
Se trataba de enviar un mensaje a Catalá, el día que la candidata del PP se hacía la foto con Mazón y era 'presentada' como futura secretaria general de los populares. El expresidente confesó hace unas semanas que está a la espera de que en el PP se den cuenta de que no hay mejor candidato para recuperar la alcaldía. Aguarda que Génova llegue a la misma conclusión a la que ha llegado él. Pero, por si acaso, Camps va haciendo camino en modo oposición. Pero en una oposición a todos. Al Botánico y también a la estructura oficial de los populares, encabezada ahora por Carlos Mazón.
Noticia Relacionada
Camps, al ser preguntado, no dudó en mandar mensajes acerca del futuro congreso de los populares. Y lo hizo apelando a la igualdad de armas de los contendientes. «Estamos en un proceso congrensual que está Mazón y José Vicente Anaya (alcalde de Ayora). Esperemos que tengan igualdad de condiciones para poder competir y que gane el que más apoyos tenga de los militantes».
Anaya es el aspirante del Foro 2020, la plataforma que tiene como referente al expresidente de la Generalitat. Todavía dio más alas a su hombre de confianza. «Representa un poco lo que en su día fue Casado al enfrentarse a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz, y la secretaria general, María Dolores de Cospedal».
El expresidente siguió ayer presumiendo de su conocimiento de la ciudad y las entrañas del Ayuntamiento para postularse como aspirante a unas elecciones municipales. Eso sí, quiere hacerlo con el PP. Insiste en que no quiere hacerlo como independiente o bajo el paraguas de Vox. «Puedo aportar algo más de 200.000 votos. Eso seguro», proclamó.
No se olvidó de las recientes elecciones en Madrid. «La Puerta del Sol y la plaza del Ayuntamiento son dos lugares que hermanados dan victorias electorales», reflexionó.
La iniciativa política, el motivo por el que se desplazó al Ayuntamiento, apuntaba a Ribó. El expresidente de la Generalitat presentó un escrito por registro de entrada en el que exige a Ribó que reclame a los promotores del PAI del Grao lo que en su día adelantó la Administración Valenciana. Existe un informe de la Intervención que aclara que el Consell tiene todavía derecho a cobrar gran parte de lo que costaron las obras efectuadas para los grandes premios de F-1. Esa factura, superior a los 50 millones de euros, lo debe reclamar el Ayuntamiento al promotor del PAI del Grao, proyecto, por el momento, paralizado. A esta cifra hay que sumar los intereses. El importe final puede rondar los 60 millones de euros. El frenazo al plan urbanístico o su modificación afectarían, evidentemente, a esta cantidad. Ese informe de la Intervención que fue definitivo para que no se ejerciera la acusación contra Camps es con el que ahora ataca a Joan Ribó.
Llamó la atención que fuera la vicealcaldesa del PSPV, Sandra Gómez, quien entró al trapo de la iniciativa de Camps, más dirigida al consumo interno de los populares que como un mensaje de oposición. Salió la dirigente socialista pero no para rebatir el fondo del asunto -no dijo nada del PAI y la reclamación- sino para anunciar que están muy ocupados tratando de arreglar todos los problemas que dejó el Gobierno de Francisco Camps.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.