Una alfombra roja con estilismos muy inspiradores

Valencia, como toda ciudad, necesita eventos que de vez en cuando la sacudan, que le hagan sentirse viva, que motive a su gente a romper con la rutina, a abrir los armarios, desempolvar las joyas y vestirse para la ocasión, con elegancia y clase. La gala de entrega de los Premios Valencianos para el Siglo XXI ya es uno de esos acontecimientos en el que los invitados dan una lección de estilismo. Por la alfombra roja que daba acceso al photocall fueron pasando los invitados con propuestas que iban desde lo más clásico a lo más vanguardista, desde apuestas seguras como el vestido negro hasta las más audaces, como los kaftanes o rojos Valentino.

Difícil hacer un ranking de elegancia. Mayrén Beneyto llevó un precioso traje negro bordado en blanco muy español de Dior, con bolso de la misma firma. Su nieta Isabel Manglano Bermejo ha heredado su criterio estético y estaba guapísima con un vestido de raso negro. Algunas optaron por darle un golpe de color al negro con una prenda superpuesta estampada, como Andrea Cañada, del estudio ERRE Arquitectura. Cristina Caruana llevó pantalón y cuerpo negro con estampado de flores rosas de Etro y chaqueta negra. Súper elegante, como Luciana Brito, de la Fundación Brito, con un vestido negro de Prada, como la cartera y zapatos Louboutin. Y del negro al blanco, que no era una elección fácil con un día lluvioso. «Ir de blanco es de guapas», suele decir una estilista de la tienda Wolf. Y tiene razón, el blanco da luz y es muy favorecedor. Así fue Vicen Fernández, con un total look de pantalón y levita con detalles de cristalitos en el cuerpo, firmado por Cary Fragueiro. La misma diseñadora eligió la modelo Malén Burgos, que llevó un dos piezas, pero esta vez en tonos teja, un color muy favorecedor para pieles claras como la suya.

¡Más blancos! Leyla Gallego, responsable de comunicación del grupo Cyclus, eligió un mini vestido de HM que contrastó con un collar en tonos corales en rojo, el mismo color que su bolso de Carolina Herrera. También de blanco nuclear fue la artista María José Marco -con un mono pantalón-, mientras que la diseñadora Hortensia Maeso optó por un beige natural en tejido de croché. La combinación de blanco y negro fue la elegida por Paula Maiques y su madre, Isabel Sanchis, ambas vestidas de su firma: Paula con un mono con corbata incrustada en el cuerpo e Isabel con una camisa drapeada y pantalón negro, las dos de la próxima colección otoño-invierno.

Más allá de los clásicos blanco y negro, la paleta de colores de las invitadas recorrió todo el arcoíris: Tatiana Gómez, del despacho de abogados Tudela & Cuesta, se atrevió con un mono granate de la firma Natural by Lila; Paula Canet fue de lila brillante; Tania Díez Moncho con un espectacular vestido de fiesta rojo con apliques de flores; María José Viguer con un traje rosa chicle de Mango e Inma Zarranz, con un vestido verde combinado con negro.

Cada vez más mujeres eligen llevar piezas de sastrería masculina inspiradas en el esmoquin. Delia Barral fue todo a una y llevó un esmoquin negro de Donna Karan, con joyas de Vicente Gracia. Amparo Lacomba apostó por una de esas chaquetas entalladas que tan bien le sientan porque marcan la silueta, y Cristina Forner -presidenta de las bodegas Marqués de Cáceres-, eligió una americana negra de Adolfo Domínguez. Mari Carmen Martínez, del Casino de Agricultura, optó por el traje completo en color negro y Mercedes Fillol combinó una chaqueta impecable de corte esmoquin con un vestido estampado de Rixo que recordaba mucho a los eternos Pucci. Los estampados fueron minoría, contados con los dedos de la mano: Leonor de Arizón, con un vestido de seda azul de estampado floral y Lucía Zaragozá, con un vestido delicioso de Sophie and Lucie. El estampado más potente fue el de Leticia Valera, que llevó un vestido largo diseñado por ella en colaboración con Fatu y Bushu, las dos mujeres africanas que regentan el taller Kassumay. La tela era muy especial, con un tinte vegetal en azules y dorados acabado a la cera, con corte desigual y largo hasta los pies. «Los motivos del tejido son pintados a mano y representan el cielo estrellado del Senegal», explicó la diseñadora.

La combinación de levita y pantalón fue una de las que más se vieron sobre la alfombra roja. Así vistió María Cosín, que confió de nuevo en su diseñadora de cabecera, Marta de Diego, autora de buena parte del fondo de armario de Hortensia Herrero, premiada por su fundación. La propia Marta llevó una de sus creaciones, un vestido de neopreno con un rico bordado en los bolsillos. Muchas invitadas combinaron sabiamente piezas de lujo con prendas de Inditex, como Lucía Fernández de Castro, de Massimo Dutti y una camiseta con el logo de Loewe, muy buscada este verano o Laura Fitera, con un tipazo envidiable, llevó un vestido de Zara negro al que añadió un bolsazo y zapatos de Dior. Como Elena Ravello, que como es ideal todo le sienta bien y estaba monísima con un pantalón negro palazzo de Zara y top a juego.

Las abogadas dieron una lección de estilo. Carolina Sánchez Margareto escogió una blusa de Zara con una falda de la firma francesa Sandro en azul claro. Paula Blanco, la mujer del promotor Sergio Aguado, apostó por un vestido de The Kooples y kimono de La fée Maraboutée.

Lo de los chicos es mucho más fácil, pero también más aburrido. Ellos se plantan su traje y por toda innovación aportan el color de la corbata, si la llevan. Claro, luego pasa lo que pasa, ellos nunca meten la pata, pero tampoco se cubren de gloria. Así es la vida: ellos siempre se ven perfectos y nosotras nunca estamos satisfechas del todo, es algo consustancial. Aun así, muchos hombres van innovando. Javier Andrés, de La Sucursal, llevó un traje chaqueta de Calvin Klein azul noche con zapatillas de Sandro y Álex Jordán un traje de Dior. Rafa Pérez Higón se decantó por un pantalón cámel con americana azul marino y camisa blanca, mientras que el interiorista Javier Segrera sacó de su armario un traje chaqueta de Prada impecable y contemporáneo. Su mujer, Rosa García, apostó por un guardapolvos de Hugo Boss.

En fin, que los invitados de la gran noche de LAS PROVINCIAS dieron una auténtica lección de estilo en un álbum de fotos que inspirará a muchos invitados.

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