Urgente El Euromillones de hoy viernes deja un nuevo millonario en España
Malén Burgos, modelo, actriz y estudiante de Odontología. JESÚS SIGNES

Malén Burgos: «Soy una persona sorda, pero he conseguido lo que quería, ser modelo y actriz»

Atribuye su fuerza y su resiliencia al ejemplo que le han dado sus padres, que siempre la han apoyado para que fuera capaz de valerse por sí misma. Por el camino se ha encontrado con muchas dificultades al ser sorda, que supera con «una gran resiliencia»

Sábado, 2 de marzo 2024, 01:20

Malén Burgos no quiere que nadie sienta compasión por ella. Al contrario. Esta mujer es pura fuerza, pero también desprende una bondad que atribuye al ejemplo de sus padres. Es sorda, pero tiene tan normalizada su discapacidad que a veces a ella misma se le ... olvida. También a sus hermanos -son siete-, que alguna vez le mandan audios, y lo cuenta entre risas. Eso no quiere decir que lo tenga fácil, al contrario, pero una combinación de resiliencia, actitud y ganas de superarse le han permitido salir adelante, no sólo a nivel personal -califica de «ángel» a su marido y tiene dos hijos- sino también en el ámbito profesional, con una carrera como modelo y actriz que comenzó en las redes sociales y un plan B para cuando fallen los flashes, y que supone un reto mayúsculo para ella.

Publicidad

-Siempre hay una historia detrás de una discapacidad, normalmente complicada.

-Yo nací oyente, hasta que se dieron cuenta de que cuando me llamaban no me giraba. Como siempre fui una niña muy obediente, mi madre, que es médico, enseguida empezó a investigar. No se sabe muy bien porqué -una vacuna, una medicación, genética-, a los dos años y medio me diagnosticaron una hipoacusia neurosensorial bilateral, una enfermedad que provocaría que poco a poco fuera perdiendo mi audición hasta que quedarme sorda por completo.

-Debió de ser duro para sus padres un diagnóstico así.

-Mis padres y abuelos, a los que estoy infinitamente agradecida, hicieron todo lo que estaba a su alcance visitando clínicas, otorrinos y haciendo estudios. Decidieron, además, no enseñarme lengua de signos, llevarme a un logopeda para estimular la audición y aprender lectura labial, además de entrenarme mucho para no perder memoria auditiva. Además, me apuntaron a ballet, a guitarra y a piano, que ha sido clave por la armonía, la disciplina, el sonido...

Publicidad

-¿De qué manera la discapacidad ha condicionado su vida?

-Globalmente hablando, le diría que no lo ha hecho porque yo todo lo que he luchado lo he logrado, pero sí es verdad que he tenido que esforzarme mucho más que cualquier otra persona. Visto con perspectiva, he ido al colegio que he querido, estoy estudiando la carrera que yo he elegido, tengo hijos, trabajo de modelo, de actriz...

«Me enseñaron lectura labial, por ese motivo la pandemia fue una locura, iba sola por la vida»

-Ha conseguido muchas más cosas que gente que no tiene ningún tipo de discapacidad.

-Creo que una de las claves son esos valores y principios que me han transmitido mis padres, empezando por la resiliencia, como un junco que se dobla pero luego vuelve al sitio. Sí, tengo dificultades, pero vamos a intentarlo. Ellos hacen que los problemas sean más pequeños. Además, estoy muy agradecida a las profesoras del colegio al que fui, el Guadalaviar, porque siempre estuvieron implicadísimas para que pudiera llevar una vida normal, ayudándome a que no me perdiera en clase pero al mismo tiempo tratándome como una más.

Publicidad

-¿Y en la universidad? Está cursando Odontología.

-En la universidad es más complicado, e incluso me he encontrado con profesores que me han llegado a decir que para qué elegir una carrera tan complicada para mí, por mis limitaciones. Bueno, es la que me gusta, déjame al menos intentarlo. Si no lo puedo conseguir lo asumiré, porque en Odontología van todos con mascarilla, y yo sin lectura labial no entiendo nada. Es como el teléfono, que si me llamas no te puedo responder porque no sé lo que me estás diciendo. Imagínate en la pandemia la locura que viví. Iba sola por la vida. Y las prácticas son siempre con mascarilla. Tampoco puedo tomar apuntes porque si dejo de mirar al profesor me pierdo. O si se gira hacia la pizarra.

-¿Qué hace cuando hay mucha gente?

-Es imposible que yo pueda seguir una conversación y la gente no llega a darse cuenta, pero no quiero ir de víctima. El problema es que no me integro. Lo intento, pero los sordos, de manera general, nos aislamos.

Publicidad

-Ha elegido una profesión en la que está continuamente conociendo a personas nuevas.

-Abrirme, conocer, enfrentarme a lo desconocido, es una forma de superarme, y me digo a mí misma que, otra vez más, he podido. Y voy creciendo interiormente... De hecho, voy a un psicólogo especializado en personas sordas y él me dice que soy de las pocas que conoce que ha salido adelante porque la mayoría no lo consigue. Creo que todo en la vida es una cuestión de actitud, de aceptar lo que te ocurre y mirar siempre hacia adelante.

«Mi marido es un ángel maravilloso que apareció en un momento muy duro»

-¿Qué hubiera dicho si alguien le hubiera vaticinado que iba a vivir de ponerse delante de las cámaras?

-No me lo hubiera creído. Es cierto que con 16 años estuve en una agencia de modelos porque siempre me gustó ese mundo, y mis padres me apoyaron. Sin embargo, no me gustaron determinadas actitudes, que me pidieran por ejemplo que me quitara la parte de arriba. Pero yo nunca acepté, y se me reducía el trabajo.

Publicidad

-¿Se ha encontrado con las mismas peticiones ahora?

-Yo ahora no estoy con ninguna agencia, me lo gestiono sola, y elijo qué quiero hacer y qué no. Todo ha sido distinto porque no era mi objetivo cuando me abrí la cuenta de Instagram. Pero una marca me contactó para una colaboración y con el tiempo se ha convertido en un trabajo que me permite vivir de ello.

-No es fácil ese mundo. Hay miles de jóvenes que lo intentan y se quedan por el camino.

-Sí, es cierto, y a veces no me lo creo todavía. Además, tengo el miedo de no saber cuánto va a durar, y por ese motivo quiero tener un plan B. Sé que tengo el apoyo incondicional de mi marido, pero al mismo tiempo quiero crecer como persona y demostrarme a mí misma que puedo.

Noticia Patrocinada

-Dice que su marido siempre la ha apoyado.

-Yo digo que es un ángel que apareció en un momento muy complicado de mi vida. Tanto, que yo le dije: «mira, te voy a poner todas las cartas sobre la mesa y no te voy a engañar en nada. Él me contestó: «me da igual, me encanta cómo eres». Ha sido un regalo maravilloso de la vida e intento dedicar tiempo a mi familia, a disfrutar de la infancia de mis hijos, que pasa demasiado rápido y no me la quiero perder.

-¿Le han ofrecido contar su historia?

Publicidad

-Tengo una amiga que trabaja en una productora y que lleva meses detrás de mí para que la cuente, pero yo me resisto. Tampoco me veo preparada para hablar en público, se me remueven las tripas sólo de pensarlo.

-¿Por qué? Seguro que sería muy inspirador para otras personas.

-Quizás cuando me sienta algo más preparada intentaré dar el salto, romper barreras, superar mis miedos y seguir creciendo. Piensa que yo no sé cómo me escuchan los demás, y aunque yo he podido salir adelante, ser sordo es muy complejo y es un trabajo diario.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad