A. Talavera
Jueves, 12 de enero 2023, 12:08
El Ayuntamiento de L'Alcúdia ha recibido una ayuda de los fondos europeos Next Generation de la Unión Europea por importe de 309.706,79 euros para rehabilitar el edificio que alberga la ludoteca municipal y distintas dependencias para las asociaciones. La ayuda se enmarca dentro del Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios (PIREP) de los fondos europeos Next Generation y del Mecanismo estatal para la Recuperación y la Resiliencia.
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La ayuda, que sólo ha sido concedida a 400 municipios de toda España en concurrencia competitiva, está destinada a una rehabilitación integral del edificio, en el sentido definido por la Agenda Urbana Española y teniendo en cuenta los criterios de sostenibilidad, inclusión y calidad estética previstos por la Nueva Bauhaus Europea.
En concreto, la actuación consiste en la rehabilitación del inmueble, que fue en otros tiempos el cuartel de la Guardia Civil, para albergar las diferentes asociaciones existentes en el pueblo así como terminar de acondicionar la totalidad del mismo para el uso cultural y social. Con estas obras se repararán humedades por capilaridad, filtraciones de agua en cubierta y a través de huecos y revestimiento interior y exterior.
También se mejorará la seguridad estructural, que implica la protección contra incendios de los forjados de cubierta. Los trabajos también incluirán los servicios necesarios y dotando al edificio de salas y espacios acorde al uso cultural y social y se eliminarán las barreras arquitectónicas. Se crearán circulaciones y espacios accesibles e incorporando la instalación de un ascensor que comunica con la primera planta.
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Por último, se creará una nueva escalera y se colocarán cristales de seguridad y se digitalizarán los espacios, con la incorporación de paneles informativos.
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Mediante la actuación propuesta, se pretende que el edificio sea un referente en la mejora de eficiencia energética incorporando, no sólo medidas activas como mejoras en las instalaciones térmicas que reduzcan el consumo de energía primaria no renovable, sino incorporando medidas pasivas que favorezcan la mejora arquitectónica de la envolvente, de modo que el coste de amortización de la intervención sea menor. Con el objetivo conseguir un consumo casi nulo se incorpora la fotovoltaica como energía renovable.
Como medidas pasivas se propone el aislamiento térmico de cubiertas y suelos además de la sustitución de las antiguas carpinterías por otras de aluminio con rotura de puente térmico y cristales dobles bajos emisivos. Con esta intervención se consigue una reducción de un 65% en energía primaria no renovable. La actuación, que ahora se encuentra en fase de proyecto, se prevé que inicie antes del verano. El importe total de las obras será 325.997,26 euros.
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