Consejos para sacarse el agua del oído y qué no hacer bajo ningún concepto

En verano nos pasamos el día, practicamente, en la playa o la piscina. Es la mejor forma para, además de divertirnos en familia o con amigos, refrescarnos e intentar 'sobrevivir' a las altas temperaturas. Nadar, chapotear, bucear e , incluso, hacer 'ahogadillas' son algunos de los placeres de esta época del año.

Sin embargo, en ocasiones se convierte en una auténtica pesadilla si acabamos la jornada con agua en el oído. Y es que, esto puede provocar un tapón que, de no mejorar, puede acabar en alguna infección u otitis

Desde la web de Healthline aseguran que «no es difícil» que uno mismo se elimine el agua que queda atrapada en el oído, y para ello comparten algunos consejos «caseros».

Entre ellos, indican sacurdir el lóbulo mientras se inclina la cabeza hacia abajo y hacia el hombro; recostarse sobre el oído en cuestión y sobre una toalla y, así, dejar que el él mismo, por sí solo, drene o inclinar la cabeza y hacer presión sobre el oído con la palma de la mano.

También recomiendan bostezar o masticar para aliviar la tensión en las trompas de Eustaquio y que el agua salga más fácilmente.

Sin embargo, desde la misma web indican que lo que no hay que hacer, ya que «puede empeorar las cosas», es introducir algodón, el dedo o cualquier otro objeto en el oído.

De hecho, aseguran que hacerlo puede agregar bacterias al área, empujar el agua más adentro del oído, lastimar el conducto auditivo e, incluso, perforar el tímpano.

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