La venenosa relación entre la Flor de Pascua y los gatos en Navidad

Se trata de unas las plantas más comunes cuando llega la Navidad, pero también una de las más peligrosas para muchas mascotas que tenemos en casa. La Poinsettia o Flor de Pascua, es una planta de grandes hojas rojas brillantes que, aunque mucha gente lo desconoce, es especialmente tóxica para los gatos.

Según explican tanto desde clínicas veterinarias como desde empresas especializadas en alimentación animal, la Flor de Pascua puede provocar problemas en los animales tanto por contacto como por ingesta.

Esta planta puede resultar irritante para su piel, provocando picores y problemas oculares, pero además es venenosa si la ingieren, y puede provocar vómitos, diarreas, malestar, letargo y salivación excesiva.

Según explica la clínica veterinaria de Benetússer, en Valencia, «la responsable de esa toxicidad es la savia que recorre toda la planta (y que a parece al quebrarse), un líquido blanco y lechoso que contiene saponina, una sustancia muy irritante que puede provocar serios trastornos al ser ingerida».

La ingesta no es mortal, pero sí que es conveniente evitar que los gatos la mordisqueen o se restrieguen contra ella por las complicaciones que puede generar.

Además, la Poinsettia no es la única planta peligrosa para los gatos, ya que el muérdago o el acebo, muy típicos también en Navidad, pueden resultar tóxicas y generarles problemas de salud a los animales.