Por qué debes retrasar la ITV cuando hace mucho calor

En una estación de ITV siempre, o casi siempre, hay una gran cola de conductores que esperan su turno para contar con el apto técnico que se otorga de forma periódica a los vehículos. Esta hilera se ve notablemente aumentada cuando nos acercamos a periodos vacacionales como la Navidad o el verano. Ahora, en plena época estival el tiempo de espera se realiza bajo un sol abrasador y con temperaturas ambientales que, de normal, superan los 30 grados. Lo que aparentemente es un trámite puede acabar siendo un dolor de cabeza por tener que superar la ITV en pleno periodo estival. Así se explica la última alerta de la AECA-ITV.

La Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos ha publicado recientemente un aviso para todos los conductores que tienen su cita reservada en una estación en la época estival. Las temperaturas extremas no son la situación más conveniente para un vehículo y sus múltiples sistemas que lo forman. De esta forma se entiende que en épocas de mucho frío y en las de mucho calor aumenten las incidencias en los vehículos en puntos esenciales para su conducción. El calor ambiental afecta de tal forma a los vehículos que, sin existir tal anomalía, pueden arrojar un resultado negativo a la hora de pasar la ITV.

Desde AECA-ITV señalan los 7 sistemas del vehículo que se revisan de forma pormenorizada en la inspección y que pueden verse afectados de forma grave por el calor, pudiendo significar un resultado negativo y no contar con el apto obligatorio para poder circular con el vehículo por la vía pública.

El primer aviso se centra en los frenos, sistema del que desde AECA-ITV señalan que «una temperatura superior a los 30 grados centígrados reduce la capacidad de refrigeración de los discos y pastillas de freno; además, también puede afectar el líquido de frenos. Durante el verano los discos pueden llegar incluso a deformarse, reduciendo la efectividad de los frenos».

Por parte de los neumáticos se recuerda que las altas temperaturas pueden implicar una pérdida de la presión, así como que aumenta el desgaste del mismo y, por lo tanto, reducen su vida útil. El aceite del coche se presenta como uno de los elementos esenciales y la alerta de las ITV reside en que una alta temperaturas puede acabar afectando al motor.

Respecto al motor, el calor afecta de forma directa al deterioro de la combustión, mientras que en el caso de las baterías «acelera su envejecimiento». El calor puede cuartear los limpiaparabrisas y el uso continuado del climatizador deberá implicar una revisión que asegure su buen estado.

Las ITV ponen el foco de atención en estos siete elementos esenciales en la inspección y que, pese a un buen cuidado del vehículo, pueden verse afectados por las altas temperaturas típicas del verano, sentenciando a un resultado negativo de la inspección tras una larga cola esperando el turno indicado.

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