La efectiva infusión para adelgazar que deja un vientre plano y se debe beber después de cenar

Adelgazar tras épocas de excesos o cuando no acabamos de vernos en nuestro peso ideal requiere, además de fuerza de voluntad, una dieta acertada basada en productos con bajo índice calórico pero nutritivos, y por supuesto en una buena dosis de ejercicio. Debemos centrarnos en recetas light que no nos aporten demasiadas calorías, pero también es importante prestar atención a los complementos que podemos incorporar para mejorar la alimentación, no picar de más y sentirnos bien de energía.

Por ejemplo, las infusiones son uno de los preparados que tendrías que tener en cuenta si aún no las tomas (estés a dieta o no), ya que ayudan a mantener el hambre a raya al saciarte y también mantienen el organismo hidratado. Además, en función de qué empleemos para hacerlas pueden tener diferentes propiedades, desde diuréticas hasta relajantes o para fortalecer el pelo y las uñas.

En concreto, hay una infusión que debería estar en tu punto de mira si sueles padecer problemas de hinchazón tras una comida o si buscas mantener el vientre plano y eliminar los gases. Se trata del hinojo, un alimento muy empleado como remedio natural por sus propiedades antiinflamatorias, por lo que se ha empleado tradicionalmente para aliviar los dolores menstruales y para otras dolencias como digestiones pesadas o infecciones bucales. También actúa como un depurativo natural con alto poder diurético, por lo que consigue eliminar las impurezas y toxinas del organismo y ayuda a adelgazar, ya que agiliza el metabolismo, reduce la retención de agua, reduce la celulitis y favorece la quema de grasas más rápidamente.

Tomar una infusión de hinojo tras la comida ayuda a controlar el sobrepeso y la hinchazón de la barriga. Además, es muy recomendable preparar esta bebida cada vez que te sientas molesto, especialmente tras cenas copiosas, en las que notas demasiada pesadez para ir a dormir.

La infusión de hinojo se prepara echando agua hirviendo sobre las semillas, de las que se recomienda usar una cucharadita por cada taza de agua caliente. SI lo prefieres, puedes echar leche caliente en lugar de agua, y también puedes endulzar su sabor con miel para darle un toque diferente.