La dieta para conseguir un vientre plano en cuatro semanas

Unos kilos arriba, unos kilos abajo. La cifra que marca la báscula varía conforme aumentamos de peso. Este número puede hacerse más alto, además, si nuestro cuerpo tiene tendencia a retener líquidos.

Conforme se acerca el verano y aumentan las temperaturas, este problema puede agravarse y aumentar la sensación de hinchadez. La solución pasa por cambiar la rutina alimentaria en dirección hacia alimentos que permitan al cuerpo sentirse más ligero.

Es importante tener en cuenta que, para deshincharse, no hay que dejar de tomar agua. Cuando bebes un nivel de agua adecuado para tu organismo, este elimina el líquido que no necesita con normalidad. Si esos niveles, sin embargo, son demasiado bajos, el cuerpo retiene el agua y la almacena en los tejidos para ir usándola.

Estas son algunas de las pautas que debes cambiar en tu alimentación para conseguir un vientre plano en cuatro semanas:

No tomar suficiente cantidad de proteína es perjudicial para la salud y, sobre todo, para tratar la sensación de pesadez. Además, puede hacer que aumenten las molestias de la hinchazón.

Al tomar proteínas, se favorece que el hígado fabrique , entre otras sustancias, albúmina, que viaja por el torrente sanguíneo y favorece la reabsorción del agua retenida en los tejidos del cuerpo.

Es importante dotar al cuerpo de unos niveles adecuados de magnesio, ya que combate la retención de líquidos, especialmente, los días previos a la menstruación. Algunos alimentos ricos en este mineral para incluir en tu dieta son las almendras, el maíz, los dátiles, las legumbres, las acelgas y el pan integral.

Los alimentos procesados pueden tener una cantidad de sal superior a la recomendada. Por eso, consumirlos más de dos días a la semana hace que se retengan líquidos.

Ingerir potasio es de lo más recomendable para aumentar la producción de orina y eliminar toxinas. Asimismo, permite compensar los niveles de sodio del cuerpo, que hacen que se retengan líquidos. La papaya, el plátano, el mango, el calabacón, la col de Bruselas, los champiñoes y la patata hervida son ideales para este fin.

Para acabar con la retención de líquidos, es fundamental acompañar las comidas diarias con algún vegetal que ayude a depurar el cuerpo. Los más diuréticos son el apio, el pepino, el limón, el puerro, la piña, los espárragos, el melón, el kiwi y la alcachofa.

Recuerda que esta es información general y bajo ningún concepto sustituye el consejo de un profesional.

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