La infusión para adelgazar que termina con el estreñimiento y la hinchazón abdominal

Septiembre es el mes para adelgazar por excelencia. Tras los excesos del verano y las vacaciones, son muchos quienes quieren perder los kilos de más rápido así que se apuntan al gimnasio y siguen una dieta demasiado restrictiva para intentar bajar de peso cuanto antes. La realidad es que introducir cambios bruscos en alimentación y rutinas suele ser contraproducente porque cuesta acostumbrarse a ellos y poder mantenerlos a largo plazo.

Para evitar el temido efecto rebote, lo mejor es optar por comidas que te gusten, pero hechas con ingredientes naturales y siempre que sea posible cocinadas en casa, asadas o hervidas. Si poco a poco mantienes una rutina de platos ligeros y haces deporte de forma habitual notarás como en pocas semanas tu cuerpo está visiblemente más definifido y notarás menor volumen.

Además puedes ayudarte de infusiones para adelgazar, bebidas naturales que potencian los efectos de una dieta y ayudan a acelerar el metabolismo, quemar grasa y eliminar toxinas. Además las puedes preparar en pocos minutos y son perfectas para tomar durante el día y mantener la saciedad. Una de las que puedes probar es la infusión de sen y menta, una combinación muy potente que tiene numerosos beneficios:

Tomar esta infusión no solo te ayudará a mantenerte hidratado durante el día, también es perfecta para deshacerse de los excesos y depurar el organismo de toxinas ya que favorece la orina. Esto es ideal también para combatir la retención de líquidos, uno de los problemas por los que en ocasiones podemos estar a dieta y no terminar de ver resultados, ya que la acumulación que se genera en zonas como el vientre o las piernas generan mayor volumen corporal.

Si por algo es conocido el sen es por su capacidad para actuar como un laxante natural altamente efectivo para combatir el estreñimiento y los problemas intestinales. Tomar una taza de esta infusión al día te ayudará a atajar este problema, que siempre se debe tratar también con la ingesta de fruta diaria.

Entre las muchas cualidades que la menta le aporta a esta infusión se encuentran sus potentes efectos digestivos, que la convierten en una opción ideal para beber después de cada comida y evitar molestias como acidez, gases o digestiones pesadas. Es antiinflamatoria y ayuda a calmar dolores, además de aliviar el estrés y mejorar las defensas.

Para preparar esta infusión puedes poner a calentar 500 ml de agua y añadir una bolsa de menta y otra de sen. Deja la mezcla hasta que llegue a ebullición y después retira del fuego y espera a que la infusión repose hasta que se enfríe. Puedes tomarla en cualquier momento del día para mantener el hambre a raya y no terminar comiendo más de lo que realmente necesitas.

Recuerda que esta es información general y bajo ningún concepto sustituye el consejo de un profesional.