La infusión diurética y antioxidante que ayuda a eliminar líquido y combatir el envejecimiento

A la hora de mantener la salud del organismo hay dos pilares fundamentales a tener en cuenta: una buena alimentación y deporte habitual. No se trata de volverse loco o de obsesionarse con dietas sumamente restrictivas, ni tampoco de pasarse tres horas al día en el gimnasio, pero dejar de lado el sedentarismo para entrenar entre dos y tres veces a la semana y cuidar lo que comes hará que estés en mejor forma física y tengas mucha más energía.

Junto a esos dos hábitos, se pueden incorporar pequeños gestos que ayuden a mejorar la salud del organismo y que dejan efectos positivos en nuestro cuerpo, como por ejemplo prestar atención a qué bebidas tomamos durante el día. Puedes tomar un refresco sin problema entre horas, pero si te apetece beber algo diferente y aliviar el calor, es preferible optar por infusiones frías y dejar de lado las bebidas azucaradas y cargadas de conservantes.

Las infusiones frías son perfectas para tomar en verano porque mantienen la hidratación del organismo al estar hechas a base de agua, mejorando la función cerebral y aportando flexibilidad a la piel. Además, reponer el agua que perdemos durante el día es esencial para hacer frente a las altas temperaturas de estos meses.

Por otra parte, el efecto diurético de las infusiones es un gran aliado para combatir la retención de líquido, ya que favorecen la orina y ayudan a eliminar a través de esta las toxinas propias de excesos y el líquido que en ocasiones se puede acumular en piernas o abdomen y causa una apariencia de mayor volumen corporal. Además, estas bebidas aportan saciedad y ayudan a mantener el hambre bajo control durante el día, siendo a su vez un gran sustituto a postres dulces después de las comidas.

Se preparan en pocos minutos y son perfectas para dejar en la nevera y tomar en frío y con hielo a cualquier hora. Una de las que puedes probar es la infusión fría de frutos rojos, una opción altamente depurativa que ayuda a limpiar el sistema renal y a prevenir infecciones de orina. Además, sus propiedades antioxidantes la convierten en un remedio natural para cuidar la salud cardiovascular y combatir el envejecimiento que ocasionan los radicales libres. En concreto, los frutos rojos (especialmente el arándano) son vasodilatadores y contribuyen a la salud del sistema circulatorio al disminuir la presión arterial.

Y es que los frutos rojos, además de contar con un buen sabor contienen alto número de antioxidantes, tanto en vitamina C como en provitamina A, por lo que su ingesta habitual ayuda a combatir el envejecimiento y a fortalecer las defensas. De ahí que también sea recomendable en época de contagios para evitar virus y resfriados.

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