S. V.
Valencia
Lunes, 29 de enero 2024, 18:53
La 'operación Thanathos' de la Policía Nacional ha sacado a la luz una trama de venta clandestina de cadáveres en Valencia que se dedicaba a proveer de cuerpos a las universidades para prácticas de estudiantes de medicina.
Publicidad
El grupo desmantelado buscaba fallecidos sin familiares, falsificaban ... la documentación para ofrecer los cuerpos a las universidades y cobraban 1.200 euros por cada servicio en concepto de traslados e incineración.
Según las investigaciones, los cuatro detenidos, el gerente, el administrador y dos trabajadores de la funeraria Montesinos, actuaban en connivencia para falsificar los documentos y retirar los cuerpos de hospitales y residencias de personas con un perfil muy determinado: ancianos sin familiares, personas sin techo o extranjeros. Así se aseguraban que no se hiciera ningún seguimiento sobre dichas donaciones por parte del juzgado o las autoridades sanitarias, logrando una mayor impunidad.
Posteriormente, vendían esos cuerpos que habían sido retirados para darles sepulturas a las universidades por una cantidad que siempre rondaba los 1.200 euros. ¿De dónde procedía el dinero si los cadáveres eran donados? Las universidades suelen abonar a las funerarias la cantidad en concepto de transporte y retirada de los cuerpos, la incineración posterior y la tramitación de los documentos. Los responsables de la trama hinchaban estos precios.
Publicidad
Los trabajadores de la funeraria investigada retiraron uno de los cadáveres del Hospital La Fe tras falsificar la documentación de la persona fallecida y llevaron el cuerpo a una universidad para que hicieran prácticas los alumnos de la Facultad de Medicina.
En España, en principio, los cuerpos que se usan en los centros de enseñanza solo puede ser donados para la ciencia por el propio interesado, sus familiares o la administración y siempre de forma gratuita.
Publicidad
Los investigadores de la Policía Nacional comprobaron cómo dos trabajadores de la funeraria, tras falsificar documentos, se habrían apoderado de un cuerpo que se encontraba en la morgue del hospital y lo habrían trasladado a una universidad para su estudio en vez de haberle dado sepultura.
Noticias relacionadas
Melchor Sáiz-Pardo / Javier Martínez
Los agentes localizaron otro caso con el mismo método. Esta vez el difunto se encontraba ingresado en una residencia geriátrica y al parecer, habría sido el propio hombre, tres días antes de fallecer quien habría supuestamente autorizado la donación de su cuerpo. En este caso, se pudo constatar que el hombre poco antes de morir tenía menoscabadas sus capacidades mentales ya que sufría un deterioro cognitivo severo, lo que no le hubiera permitido entender lo que suponía la donación.
Publicidad
Según la investigación policial, los trabajadores de la funeraria cambiaron el destino de uno de los cadáveres y lo remitieron a una determinada facultad de medicina, siendo finalmente llevado a otra, la cual pagaba más dinero por el mismo servicio. Para ello, consiguieron mediante engaño que personal sanitario aceptara el cambio de destino del cuerpo.
Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.