Más control sobre la carga y descarga en la zona con cámaras de Ciutat Vella

Es una de las principales conclusiones que sale del encuentro que han mantenido este jueves el concejal delegado de Movilidad, Jesús Carbonell, y la Associació de Veïns Amics del Carme, que acudía con la petición clara de que se mantengan encendidas las cámaras. Por ahora, lo han conseguido, pero las reuniones continúan y el Consistorio no descarta hacerlo cuando terminen los contactos. Pero poco más. Reclamaron que se ampliara la zona vigilada, y el Consistorio contestó que quizá en el futuro, pero ahora mismo no se contempla.

Donde sí fue receptivo el Ayuntamiento, que se limitó a asegurar que fue una reunión de trabajo de donde no se pueden extraer demasiadas conclusiones, es en aumentar el control de las cámaras sobre los vehículos que ejercen labores de carga y descarga. De las 44.000 autorizaciones, únicamente un 9% corresponden a vecinos en la zona, por lo que es de suponer que decenas de miles de furgonetas y camiones tienen permiso para entrar. ¿En qué afecta eso al barrio? Bueno, en mucho, si preguntas a los vecinos, que aseguran que no respetan el horario adecuado, con las consiguientes molestias de ruido o tráfico.

«El concejal ve posible implementar la propuesta vecinal sobre el control de vehículos de carga y descarga a través de cámaras de lectura de matrículas para que el parque de distribución de mercancías cumpla la ordenanza municipal y no provoque molestias al vecindario a deshoras», indica Amics del Carme en un comunicado. Por regla general, la carga y descarga se puede hacer de 7 a 11 horas, aunque en los locales de ocio que abren por las noches se suele hacer más tarde porque a esas horas no están abiertos, lo que provoca las molestias que denuncia la asociación.

Los comerciantes, por su parte, le pedirán en la reunión de este viernes más o menos lo contrario. «Necesitamos más número de autorizaciones: hay que incrementar al menos a 15 para los comercios porque muchos se quedan cortos. Tenemos casos como el Teatro Talía con el que se hizo una excepción, pero, aún así, hay ocasiones en que tiene problemas. También tenemos una veterinaria que se queda corta con 10 al día», han explicado fuentes de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico y del Ensanche. Desde la entidad son conscientes de que en determinados locales la carga y descarga se hace en horarios distintos a los que marca la ordenanza, pero insisten en que se trata de establecimientos que no abren por la mañana.

El Ayuntamiento se ha comprometido a hacer, a través de la concesión del estacionamiento regulado, el conocido como ORA, un mayor control del aparcamiento irregular en la zona verde y en la zona naranja, «así como a realizar más campañas informativas sobre el funcionamiento de la APR y a mejorar la señalética que advierte a los conductores de la entrada en una zona de acceso restringido».

Los residentes han agradecido al Consistorio la rápida reacción ante la petición de reponer dos aparcabicis y un banco de piedra desaparecidos en 2021 en la calle Estamenyeria Vella. «Amics del Carme ha estado durante dos años pidiendo su reposición y el concejal Carbonell nos ha trasladado la noticia de que repondrán los aparcabicis de forma inmediata y que ha trasladado a Urbanismo la petición del vecindario sobre el banco», han celebrado.