Mendes trae a Gattuso al Valencia

A Layhoon se le fue poco a poco agotando la paciencia cuando en cada rueda de prensa que ofrecía como presidenta del Valencia, los periodistas le preguntaban por Jorge Mendes y su estrecha vinculación con Peter Lim. La que dijo ser la mano derecha de Lim sacó su genio asiático una tarde y afirmó visiblemente cabreada en la sala de prensa de Mestalla y con cara de pocos amigos que ya estaba bien de insistir sobre el tema, que Mendes no tenía nada que ver con el Valencia. Después de un tiempo de cierta inactividad del superagente con todo lo que tiene que ver con el club de Mestalla, al menos de una manera directa, el portugués vuelve a aparecer en escena. Y lo hace a lo grande, como actor principal y sin operaciones encubiertas de jugadores. Lim descolgó el teléfono, llamó a su amigo y le dijo que le buscara un recambio para Bordalás. Lo sorprendente es que el encargo le llegó hace ya bastantes semanas, antes incluso de la disputa de la final de Copa y hasta hubo un contacto previo con el elegido mientras el actual entrenador soñaba con el título copero.

Y Lim, por supuesto, ya tiene lo que quería. Gennaro Ivan Gattuso (9-1-1978) se va a convertir en el nuevo entrenador del Valencia. A rey muerto (no por muerte natural), rey puesto. A Bordalás le han birlado la corona y lo han hecho con nocturnidad y de manera teledirigida desde once mil kilómetros. El martes por la noche se descubrió que Gattuso y Mendes volaban a Singapur para entrevistarse con Lim, aprovechando que allí está el nuevo director general (Sean Bai, que parece que regresa hoy) y apenas pocas horas después el mismo Valencia estaba promocionando y hablando de los parabienes del italiano en su propia radio oficial, aprovechando también para esparcir las razones por la que Bordalás había defraudado. Y eso, a pesar de que el técnico alicantino todavía se sentía, al menos oficialmente, entrenador del Valencia. Primero porque tiene contrato para la próxima temporada y segundo porque nadie le había informado de lo contrario. Son las maneras que se gasta Meriton, que en la misma semana que ha decapitado al presidente, se ha cargado también al que iba a ser el entrenador del futuro y al que lo tenía casi marginado en lo que a la planificación se refiere.

Otro pellizco que irremediablemente sale de la caja fuerte para pagar una indemnización por despido. Lo mismo que pasó en su día con Pizzi, Nuno, Gary Neville, Pako Ayestarán, Marcelino, Celades y Javi Gracia. Lim firma entrenadores con la misma facilidad con la que los descabalga del proyecto cuando o bien no funcionan como él quiere o cuando le levantan la voz, cuestiones que Bordalás parece haber cumplido al cien por cien.

Para el noveno proyecto, el que viene de nuevo sin Europa, ha considerado que Bordalás no le satisfacía. En Singapur se han cansado del tono de crítica que en algún que otro momento ha tenido el alicantino y sobre todo de una temporada anodina en cuanto a juego y resultados. Bordalás va al mismo saco que Marcelino y Javi Gracia, que no se mordieron la lengua.

Con Gattuso se abre una nueva etapa en la que inevitablemente Mendes vuelve a estar muy presente. Y eso es una circunstancia que levanta siempre el recelo de la afición, ya de por sí soliviantada con las maneras de gestión de Meriton. Si el equipo no funciona en un año que se espera duro –por las ventas de futbolistas por 70 millones–, el valencianista de a pie tendrá más munición con la que atizar al máximo accionista. La sospecha del negocio de compra-venta de jugadores volverá a estar presente. En parte porque de Mendes se espera que participe activamente no sólo a la hora de facilitar las ventas (Guedes, por ejemplo), sino también en las compras.

A Gattuso le explicaron ayer en Singapur bajo qué parámetros se va a ajustar el Valencia 2022-23. Estaba interesado el italiano en saber qué se va a encontrar. Tiene experiencia, tanto como jugador como entrenador, pero su roce con el presidente de la Fiorentina por su interés en que contratara jugadores representados por Mendes parece que esta vez no va a ser motivo de fricción. Con Lim, todo lo que tenga que ver con el superagente portugués es bien recibido. La firma del contrato será hasta 2024. Dos años de Gattuso para relanzar al Valencia tras cuatro sin Europa. Ese será su reto. De él, de Jorge Mendes y también de Peter Lim.

Del modelo ya conocido a Riqui Puig

Con Lim pisando la alfombra roja de Mestalla en 2014, casi nada de lo que se hacía en el Valencia escapaba a la tutela de Jorge Mendes. Ese primer año de gestión meritoniana llegaron Cancelo, Rodrigo, André Gomes, Mustafi, Orban, Negredo, Enzo Pérez y Filipe Augusto. Meses antes, con Salvo a los mandos, se había cerrado el fichaje de Otamendi. Desembarcó Nuno y el Valencia terminó cuarto con la friolera de 77 puntos. Se marchó Salvo y tras él se fueron Rufete y su equipo de trabajo. ¿Quién se quedó al mando de la secretaría técnica del Valencia? Nuno. El portugués se hizo tan fuerte y controlador (hasta los empleados recelaban de él) que acabó por no saber gestionar los esfuerzos ni en una parcela ni en otra y tras un 1-0 en Sevilla fue destituido. García Pitarch se incorporó en enero (2016) para cubrir una carencia y no fue todo lo bien que esperaba Meriton. Ahora, la dirección deportiva del Valencia la representa un Miguel Ángel Corona con la credibilidad bajo mínimos. El hombre fuerte en la gestión va a ser Sean Bai aunque nadie duda de que todo se decide una vez más en Singapur, ahora ya de manera evidente. Pero la vinculación de Gattuso con Mendes y con Lim sitúan al preparador italiano en un escalafón muy alejado del que han podido representar los últimos entrenadores que han desfilado. Por así decirlo, sería una vuelta al pasado, a esa etapa en la que nadie tenía dudas del poder de Nuno al ser hombre de Mendes y de Lim a la vez.

Habrá que ver en qué situación queda Corona, a quien las palabras de Murthy en los famosos audios no dejaron en muy buen lugar en lo que a la efectividad de la dirección deportiva se refiere. Cada vez quedan menos dudas de que los fichajes va a tener que ver de alguna u otra forma con Mendes. De momento, desde Barcelona ya se ha apuntado un nombre que tiene el interés de Gattuso: Riqui Puig, centrocampista del Barça. La presencia de Laporta, su reciente reunión con Murthy (posible venta de Carlos Soler) y su amistad con Lim le dan al jugador (22 años) más posibilidades.

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