Adrian Ilie, la 'Cobra' que se desliza por el sector inmobiliario

'Aquellos maravillosos años' es una de esas nostálgicas expresiones que pasan por la cabeza de Adrian Ilie si recuerda las cuatro felices temporadas que pasó en Mestalla. El futbolista rumano dejó en Valencia títulos (una Liga con Benítez, una Copa del Rey, una Supercopa de España y una Intertoto), 45 goles e innumerables regates y cabalgadas que hicieron que la afición blanquinegra cayera rendida a los encantos futbolísticos de 'La Cobra', apodo que recibió por sus picaduras futbolísticas. Claudio Ranieri fue el técnico que utilizó por primera vez este simpático mote que bautizó para siempre a Ilie: «Adrian es letal, como una cobra que te pica y te mata», decía el italiano. El delantero formó una temible dupla en ataque junto a Claudio 'Piojo' López y otros entrenadores posteriores como Héctor Cúper y Rafa Benítez también confiaron en sus condiciones.

El atacante disputó las dos finales de Liga de Campeones que perdió el Valencia de manera consecutiva y tras una bajada de su rendimiento se marchó al Alavés después de levantar la primera de las ligas de la era Benítez. Ambos subcampeonatos europeos unidos a su gran actuación en el Mundial de Francia 1998 llevaron a clubes poderosos como el Real Madrid y el Manchester United a interesarse por los servicios de Ilie. Las jugosas tentativas no fueron suficientes ya que el jugador rumano tenía el valencianismo muy inculcado. Su hermano Sabin, por cierto, pasó sin pena ni gloria por el club de Mestalla ya que en la campaña 1998-1999 apenas disputó 60 minutos con la camiseta blanquinegra a pesar de haber firmado por cinco temporadas.

Una grave lesión de rodilla, que le obligó a colgar las botas en el año 2006, no le alejó del mundo del fútbol ya que el exvalencianista ocupa parte de su tiempo representando a otros jugadores. A sus 46 años, el sector inmobiliario es también protagonista de la vida de Ilie ya que posee, entre otros inmuebles, un hotel, una discoteca y unas instalaciones deportivas. El Hotel Ruia, un complejo que se encuentra en el centro de Poiana Brașov, a solo 400 metros de la pista de esquí de Bradu en Rumanía, le pertenece. También fue uno de los propietarios de un club rumano ya disuelto, el Forex Brasov.