El fiscal pide la imputación de la directora de la residencia de Llíria por el trato a los internos

La Fiscalía de Valencia ha llevado la investigación sobre el trato que recibían internos en una residencia de Llíria al juzgado y solicita la imputación de la directora del centro. El fiscal encargado de las diligencias, tras analizar un informe de la Guardia Civil e interrogar a la trabajadora que grabó los vídeos al comprobar el lamentable estado que presentaba la mayoría de los ancianos, ha considerado que la actuación de la directiva, como garante de los internos, «socava gravemente la dignidad e integridad moral de los residentes, hecho que todavía era más patente en las personas de mayor edad o las que presentaban trastornos físicos y psíquicos». Ahora, el juzgado que asuma el asunto abrirá unas diligencias previas para aclarar lo ocurrido. Una de las primeras actuaciones será la declaración como investigada de la directora del centro.

El ministerio público ha visionado 11 archivos de vídeo que grabó una extrabajadora de la residencia Domus Jardines de Llíria. Lo hizo tras comprobar la escasa atención que recibían los ancianos. En los vídeos se puede comprobar residentes semidesnudos, atados a las sillas, tirados en el suelo o incluso con heridas en brazos y piernas. Son numerosos, más de una docena, los familiares de pacientes que han acudido a dependencias de la Guardia Civil para dar su versión de los hechos y el trato que dispensaron a sus seres queridos. Los testimonios coinciden en la falta de higiene en las instalaciones, la escasa preocupación por la medicación y alimentación de los internos así como el lamentable estado del mobiliario. Todas estas declaraciones se han incorporado al expediente judicial.

Por otra parte, el fiscal solicitó a la Conselleria de Igualdad, responsable final de estas instalaciones, todos los expedientes que se habían efectuado sobre el centro. La última visita es de julio de este año donde se constataron algunas graves deficiencias que en septiembre de este año, una vez se conoció el caso y se abrió una investigación por parte de la fiscalía, todavía no se habían corregido. El centro recibió una propuesta de sanción de 80.000 euros el pasado mes de agosto. Pero la situación detectada es de tal gravedad que rebasa la esfera administrativa y se va a investigar penalmente.

La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, ha afirmado este miércoles que ve «adecuado» que la Fiscalía actúe sobre los «hechos indeseables» ocurridos en la residencia de ancianos Domus Vi de Llíria, y ha pedido «que se depuren todas las responsabilidades».

Ha destacado que ya habían detectado que en esa residencia de Llíria se estaban produciendo «hechos indeseables, y además sancionables desde el punto de vista de la legislación administrativa», y ha recordado que se le impuso la mayor sanción que la Generalitat ha resuelto nunca contra una residencia.

Oltra ha indicado asimismo que este centro «forma parte de un entramado empresarial que tiene problemas de tratos no correctos y degradantes» a las personas residentes, no solo en la Comunitat Valenciana, sino que también ha tenido problemas en Cataluña, Galicia y Castilla y León.