Las colas del 'vacunódromo' del Palau llegan hasta las Torres de Serranos

La puesta en marcha del pasaporte Covid está empujando a vacunarse a las personas que hasta ahora habían rehusado buscar la inmunización frente al coronavirus y también a aquellas que van en busca de la dosis de refuerzo que suelen ser mayores de 60 años o aquellas a las que se les inoculó la monodosis de Janssen. Si el domingo hubo colas en el 'vacunódromo' del Palau de la Generalitat, este martes llegaban hasta las Torres de Serranos, tal fue la afluencia que se registró.

Este último fin de semana acudieron a inmunizarse 2.076 personas al centro de vacunación itinerante instalado en la plaza de Manises y de estas, 882 acudieron el sábado. Y de los dos millares que fueron a este centro, 800 recibieron por primera vez una dosis durante el sábado, domingo y lunes pasados.

Detrás de estos 800 valencianos que han acudido a recibir la primera dosis está la puesta en marcha del pasaporte o certificado Covid, cuya presentación es indispensable para acudir, por ejemplo, a un concierto en el que haya más de 500 participantes, o entrara un restaurante o un bar con un aforo de más de 50 personas, a un salón de banquetes, a una discoteca, a un bingo o a un salón de juegos. Quizá por ello, durante los primeros cuatro días de diciembre prácticamente un millón y medio de valencianos han logrado el mencionado carné Covid.

La necesidad del certificado para acceder a actividades sociales, aunque también para realizar visitas a los hospitales o a las residencias de mayores, incrementó un 74% la administración de primeras dosis de la vacuna en la última semana de noviembre respecto a la primera del mismo mes.

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