Marciano Gómez, conseller de Sanidad: el mayor presupuesto del Consell en sus manos

Marciano Gómez, nacido en Cuenca, fue en tiempos de Joaquín Farnos al frente de Sanidad el director general para la Prestación Asistencial. Posterioremente fue secretario autonómico de Sanidad y responsable de la Agencia Valenciana de Salud hasta 2004 (con Serafín Castellano y Vicente Rambla al frente de esa conselleria), y desde hace más de diez años, desde 2011 y ya fuera del espectro político, es el director del Area Médica del Hospital La Fe.

Es licenciado en Medicina y Cirugía y especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Además, es especialista universitario en acreditación de centros y servicios sanitarios. Se trata, por tanto, de un médico con acreditada experiencia profesional en su sector y también en la gestión política, que desarrolló principalmente durante los años en que Zaplana presidía el Consell.

Gómez también cuenta con un máster en dirección y organización de hospitales y servicios de salud, un máster en gestión para la humanización de la sanidad y otro máster en hospitalización domiciliaria. «Es considerado impulsor en la gestión sanitaria para la implantación de la colaboración público privada, de la eficiencia en la Salud Pública y de la normativa que regula las guardias médicas, tanto en el ámbito de la Atención Primaria como de la hospitalaria, vigentes en la actualidad», ha destacado Mazón. Su paso por la Administración le generó amigos y enemigos. Vuelve a la arena política y lo hará, supuestamente «blindado». La oposición le espera con la espada en alto. Todo el tema de las reversiones de la gestión de los hospitales es un asunto sobre el que la izquierda tiene puesto el foco.

Mazón desplegó su proyecto para dirigir la Generalitat hace meses. En enero ya anunció su intención de potenciar la Sanidad. En este sentido, el dirigente del PP aseguró que, con su partido en la Generalitat, la Sanidad se «blindará» para garantizar su calidad y buena gestión y no bajará del 30% en el peso del presupuesto de la Generalitat. Eso supondrá que, de los más de 7.000 millones de euros actuales pasará a cerca de 9.000. El jefe del Consell ha reiterado de manera machacona sus críticas por el «abandono» y el «colapso» del servicio sanitario, así que esa es la actuación sobre la que Marciano Gómez tendrá que ponerse a trabajar desde el primer minuto en un área que para Mazón ha sido prioritaria durante su labor como líder de la oposición y que siempre ha situado en la cabecera de lo que será su gestión.