Las 3 claves para bajar el colesterol

Reducir el colesterol está entre los objetivos de multitud de personas. Tener niveles de LDL elevados es muy perjudicial para la salud del organismo, ya que dificulta la circulación sanguínea en las arterias y puede provocar enfermedades cardiovasculares de alto riesgo.

El colesterol elevado, también denominado hipercolesterolemia, es uno de los factores determinantes del riesgo cardiovascular de un individuo, pero no es el único: «También son decisivos otros aspectos, como la hipertensión arterial, el tabaquismo, la obesidad, la diabetes, una vida sedentaria, la edad y el sexo, determinados antecedentes familiares…», advierten desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Un colesterol alto aumenta las probabilidades de sufrir enfermedades como el infarto de miocardio o la angina de pecho, pero se puede combatir con una dieta adecuada y ejercicio físico regular. En concreto, hay tres aspectos que resultan clave a la hora de reducir los niveles de LDL y conseguir mantenerlos a raya, tal y como detalla la OCU.

1. Ejercicio regular: Hacer ejercicio habitualmente es fundamental para complementar una dieta saludable baja en colesterol, como la mediterránea, y también baja en grasas saturadas. Practicar deporte a menudo contribuye a reducir el LDL y a mejorar la forma física, por lo que si simplemente delegamos en los beneficios de una alimentación sana no veremos resultados tan efectivos.

2. Dieta saludable: Llevar una alimentación sana y alejada de excesos es imprescindible si se necesita reducir el colesterol. Para ello se deben evitar los productos ultraprocesados y los expertos recomiendan en especial seguir la dieta mediterránea para bajar el LDL ya que contiene los alimentos fundamentales que no deben faltar en la ingesta diaria de una persona con colesterol: «frutas, verduras y legumbres, aceite de oliva, pescado azul y frutos secos», explica la OCU.

3. Medicamentos. Algunas personas necesitarán tomar además medicamentos reductores del colesterol, siempre bajo prescripción médica. En función de los niveles de colesterol en sangre y de la coexistencia de otros factores de riesgo cardiovascular, puede que el médico recete algún fármaco o producto que ayude a luchar contra este problema, pero nunca deben descuidarse la dieta y el ejercicio.

Además, hay muchos ingredientes que aportan multitud de propiedades al organismo y cuya ingesta diaria también contribuye a reducir el colesterol, como ciertos superalimentos o algunas infusiones. La clave está en idear recetas sanas y sabrosas con productos que podamos cocinar en casa, para configurar una dieta saludable que podamos mantener a largo plazo. Para ello, consulta ideas y más información sobre dietética y nutrición.

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