La infusión para tomar en verano que ayuda a evitar la hinchazón y eliminar toxinas

Estar en buena forma física pasa por mantener, de forma constante, dos pilares básicos en tu rutina: una alimentación saludable y entrenamiento regular. No hace falta que te pases horas y horas en el gimnasio, basta con que encuentres una práctica deportiva que te motive lo suficiente como para hacer al menos dos o tres veces por semana. Respecto a la dieta, lo ideal es que esté basada en productos frescos y de temporada, así como preparar en casa tus propios platos en lugar de optar por los precocinados.

El auge de la tendencia 'healthy', que también se deja notar en redes sociales, ha hecho que los superalimentos y las infusiones hayan ido ganando fama y no falten ya en la rutina de muchas personas. En el caso de estas bebidas naturales, han tenido un gran pico de popularidad en gracias a los muchos beneficios que dejan en el cuerpo y su efecto saciante, que ayuda a controlar el hambre durante el día y no caer en antojos cada dos por tres.

Aunque ahora en verano puede apetecer menos tomarlas en caliente y solemos optar por opciones más refrescantes, son perfectas para tomarlas en frío y con hielo y evitar recurrir a un refresco azucarado y alto en calorías.

Hay muchas diferentes y según el objetivo que persigas conviene optar por una u otra. Por ejemplo, si padeces hinchazón abdominal y sueles tener la barriga abultada y muy pesada, una buena alternativa para beber durante el día es la infusión de manzanilla y limón. Para aliviar esta molestia, que a veces incluso produce dolor por distensión abdominal, tomar una taza de esta bebida puede ser de ayuda gracias a su poder antiinflamatorio y digestivo, que ayuda a evitar pesadez y gases tras las comidas y a desinflamar la zona.

Además, el limón tiene propiedades antioxidantes que cuidan la salud cardiovascular y está cargado de vitamina C, que fortalece el sistema inmume, por lo que tomar esta infusión habitualmente te ayudará a mejorar las defensas y preparar el organismo para hacer frente a virus e infecciones.

Y si tu objetivo es cuidar la línea, el limón tiene efecto quemagrasas que contribuye a acelerar el metabolismo y a que el cuerpo consuma las calorías ingeridas en lugar de acumularlas. Esto se complementa con su función diurética, porque al favorecer la orina se encarga de drenar el exceso de líquido del organismo, combatiendo la retención y siendo útil para perder volumen corporal a largo plazo y eliminar toxinas.