Cuatro amigos andaluces arrancaron, allá por 2013, una marca de gafas de sol llamada Mr. Boho con una aportación de dos mil euros cada uno. ... Primero fueron 600 unidades en aquella primera tirada que, como la primera edición de un 'best seller', se agotaron enseguida. «A las dos semanas duplicamos pedido y antes de que acabara el año habíamos vendido 12.000 pares de gafas», contaba a Expansión Daniel Alberola, CEO y cofundador del negocio, repartido a partes iguales con los otros tres fundadores, aunque dos de ellos ya están ajenos a la gestión diaria. «La idea cuajó porque la lente espejo de colores era tendencia y no existía un modelo con una calidad-precio como la que ideamos, a medio camino entre la alta gama y el low-cost», recuerda Eduardo Jones, que es director creativo de la marca.
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Once años después, tienen sus diseños repartidos en 1.800 puntos de venta en 40 países, y ahora quieren intentarlo con tiendas propias, como la que abrirá en los próximos meses en la calle Don Juan de Austria de Valencia, justo en el local que ocupaba la marca de relojes Swatch, que ha decidido trasladarse a la calle Colón. La operación inmobiliaria ha corrido a cargo de Everest Consultores, que regenta Pedro García. Mr. Boho busca ahora con estas tiendas físicas -la primera abrió en Madrid- la experiencia que busca el usuario de la marca, y que va más allá, según cuentan sus propios fundadores, de que haya famosos que lucen sus diseños, como Rosalía, Ana Boyer o Beatrice Borromeo, la mujer de Pierre Casiraghi, que las compró en pleno confinamiento.
El objetivo de la marca este año es cerrar 2024 con la venta de 250.000 unidades, un 25% más que en 2023 y llegar a una facturación de unos 6,5 millones de euros. A futuro, además de la apertura de varios locales en diferentes ciudades españolas, es apostar por su segundo mercado, que es Francia.
Mientras, las firmas que en sus inicios apostaron por la presencia virtual, viran su negocio también hacia la apertura de tiendas físicas con el objetivo de conectar directamente con sus clientes y permitir que de esta forma se identifique todavía más con la marca. Así lo han hecho marcas que nacieron en las redes, sobre todo enfocadas a la generación Z, como Nude Project, Blue Banana o la valenciana The Are. Esta presencia en las calles más comerciales de las ciudades ha permitido que el mercado de los locales vuelva a alcanzar precios anteriores a la pandemia y que, además, se creen nuevas zonas 'prime' por la saturación de las calles más tradicionales, como Colón o Don Juan de Austria. Así, el entorno del Mercado de Colón se ha convertido en uno de los entornos más cotizados.
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Don Juan de Austria, donde ahora se ubicará Mr. Boho, está viviendo también una época de esplendor que perdió tras el cierre de la galería Austria, y que ha recuperado gracias a la llegada de la 'flagship' de Zara, que ha ejercido de tractor al resto de los locales.
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