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Cuando Clara empezó con su blog de familia y niños Saquito de Canela hace ocho años no sabía que esa ilusión que iniciaba como un hobby acabaría derivando en una profesión gratificante. Su experiencia narrando sus vivencias como madre la animaron a crear la startup Kran Club, «una editorial que va más allá de los cuentos con un club de lectura y sesiones en directo para fomentar la lectoescritura en los niños», explica la emprendedora y escritora.
Tiempo atrás, Clara había escrito para sus hijos un cuento titulado 'Tengo un secreto' tras una época en la que su hija Jimena sufría cada mañana cuando tenía que quedarse en el cole. «Me contaron una técnica que consiste en poner un corazón de tinta en su muñeca y en la mía para que cuando se acordase de mí lo mirara». De ahí surgió una historia que decidió profesionalizar durante la pandemia y contó con Javier Gómez-Ferrer para que lo ilustrara. Después se lanzó con 'Donde están mis uñas', una forma simpática y con un toque de humor de que los niños vean que no deben morderse las uñas.
En este momento está trabajando en el tercer libro, que va a ir sobre la concentración. «Me gusta recalcar que es ficción. En el tema de la maternidad hay muchos profesionales que sientan cátedra, yo hago libros divertidos para que los niños los disfruten».
SATISFACCIÓN. «Que haya madres y padres que me llamen para decirme que mi libro les ha servido es súper gratificante».
EL RETO. «Creo que captar la atención de un niño y envolverle con una historia es muy complicado hoy en día, las pantallas son una gran competencia para los libros».
INSEGURIDAD. «A veces siento el síndrome del impostor, y me digo: '¿quién soy yo para escribir cuentos?'».
MODELOS. «Me encantan los libros de Roald Dahl y las historias de Isadora Moon».
«Mis hijos tienen sentimientos encontrados con lo que yo escribo». Y Clara pone un ejemplo: «cuando Jimena leyó 'Donde están mis uñas' protestó porque pensaba que lo había escrito porque ella se mordía las uñas». La respuesta de su madre fue que ella le había servido de inspiración. Voy con una libreta y un boli encima para anotarme anécdotas y cosas que me cuentan. Les encantan mis libros y los leen en el cole con sus amigos».
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