El alimento que ayuda a mejorar la circulación, combate el envejecimiento y disminuye las molestias premenstruales

Los superalimentos y las infusiones han ganado presencia con el paso de los años en las dietas de muchos de nosotros, gracias a sus múltiples propiedades y beneficios. Y es que los también denominados 'superfoods' abarcan una gran variedad de tipos y formas, lo que les permite ser muy versátiles. De ahí que sean un recurso en épocas de excesos, especialmente ahora que llega el verano.

No obstante, hay que tener en cuenta que las dietas milagro no existen y todo reside en una alimentación sana y equilibrada, tal y como afirman los expertos en nutrición. A esto hay que sumarle la realización de ejercicio físico de manera frecuente y evitar las calorías vacías. Si se combinan todos estos factores obtendremos resultados antes de lo previsto.

Retomando el ámbito de los superalimentos, se pueden conseguir de manera sencilla en herbolarios y supermercados. Aunque se venden en ocasiones como algo exótico, en esencia son productos cargados de tantas propiedades que resultan muy beneficiosos para el organismo y que incluso puedes tener en casa de toda la vida.

Los superalimentos son geniales para tener en la despensa ya que hacen que cualquier receta sea mucho más nutritiva y saludable. Un ejemplo de lo desconocido es el ginkgo biloba, una planta asiática cuyo fruto se utiliza en gastronomía. La parte de esta planta que se utiliza a nivel medicinal son las hojas.

Carmen Rubio, doctora en farmacia y profesora titular de toxicología de la Universidad de La Laguna (Tenerife), explica que este alimento es muy beneficioso «para aumentar la vitalidad mental y favorecer el flujo sanguíneo, especialmente del sistema nervioso central». También tiene ciertos efectos sobre el sistema cardiovascular y propiedades antioxidantes.

Además, las hojas del ginkgo biloba tienen tres tipos de compuestos de interés medicinal como son los flavonides que son antioxidantes y, por lo tanto, ayudan a combatir los radicales libres y prevenir el envejecimiento. También hay que destacar los ginkgólidos y bilobálidos. Estos dos últimos pertenecen al grupo de compuestos orgánicos denominados terpenos. Estos compuestos presentan propiedades beneficiosas sobre la función hepática y biliar. También han mostrado actividad antiinflamatoria.

Un estudio publicado en el Journal of Alternative and Complementary Medicine señala que reduce un 23% las molestias en jóvenes estudiantes. Curiosamente la mejoría se produjo tanto en los síntomas físicos como en los psicológicos.

El ginkgo biloba se puede encontrar en comprimidos, en extractos líquidos o en geles. Sus hojas desecadas se utilizan para hacer infusiones, que generalmente acompañan al té y a otras hojas.

Recuerda que esta es información general y bajo ningún concepto sustituye el consejo de un profesional.

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