Comer bien no está ligado con no darse caprichos en la mesa o con que tengas que decir adiós por completo a tus comidas o dulces favoritos. Se trata de mantener un equilibrio entre lo que comes y la energía que necesita tu cuerpo, además de que en esa alimentación no falten vitaminas ni minerales. Además, para complementar estas pautas siempre puedes incluir complementos saludables que potencien los efectos de esta rutina en tu organismo, como las infusiones.
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Estas bebidas naturales ayudan a controlar el hambre entre horas gracias a su efecto saciante y también a mantener el organismo hidratado y llegar a los dos litros de agua diarios recomendados para que el cuerpo mantenga sus funciones. Además, las infusiones son muy sencillas y rápidas de preparar, puedes tenerlas listas en cinco minutos y son perfectas para tomar en cualquier momento del día y evitar el antojo de dulce o picar algo poco saludable.
Hay muchas opciones de infusiones en el mercado e incluso puedes hacer combinaciones de varios ingredientes en función de tus necesidades. Puedes hacerte con ellas en cualquier supermercado o herbolario a muy buen precio y tener varias en la despensa para preparar según el día.
Por ejemplo, una de las que puedes preparar en esta época de muchos contagios por gripe y resfriados es la infusión de tomillo y miel, un clásico que nunca falla y es muy recomendable para mantener alejados los virus, siempre que tus defensas estén fortalecidas con una buena alimentación. Tomar esta bebida es un extra para conseguir esquivar resfriados y es tan sencilla de preparar como poner a hervir 250 ml de agua y añadir el tomillo junto con la miel. Espera a que llegue a ebullición antes de retirar y colar la mezcla. La miel, además de darle un toque dulce, ayudará a calmar las molestias de garganta y la inflación propias de los días más fríos.
Por otra parte, es una bebida con poder antioxidante gracias a su contenido en flavonoides, por lo que además de mejorar las defensas ayuda a combatir el envejecimiento y cuidar la salud cardiovascular.
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Otro de los puntos fuertes de esta infusión son sus propiedades carminativas, que ayudan a calmar la hinchazón y expulsar los gases, así que es muy recomendable tomarla (especialmente tras las comidas) si sueles sufrir de inflamación intestinal.
Además, también es antibacteriana y antifúngica así que ayuda a mantener a raya las infecciones. También es antiinflamatoria y una muy buena opción para calmar dolores como el bucal o menstrual.
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