El acusado de matar a Marta declara que consumieron seis gramos de cocaína en la cita sexual en Manuel

El hombre encarcelado por la desaparición y muerte de Marta Calvo, el narcotraficante colombiano Jorge Ignacio P. J., declaró a la Guardia Civil que consumieron seis gramos de cocaína en la cita sexual cuando murió la joven en la casa de Manuel en la madrugada del 7 de noviembre, según ha informado el periodista Nacho Abad en el programa 'Espejo Público'. El detenido negó haber asesinado a Marta y manifestó que descubrió que estaba muerta en la cama cuando él se despertó.

Sobre la forma en la que se deshizo del cadáver, Jorge Ignacio afirmó que lo troceó en una decena de partes y arrojó los restos humanos en bolsas a contenedores de Alzira y Silla. El detenido declaró que decidió descuartizar el cuerpo en el cuarto de baño porque era muy complicado sacarlo de la casa sin que lo viera ningún vecino.

Primero arrojó el teléfono, el bolso y la ropa de la joven a un contenedor junto a una gasolinera en la Llosa de Ranes, después se desplazó hasta un supermercado de l'Olleria para comprar dos paquetes de bolsas de basura grande y guantes de látex, y luego compró dos sierras en un ferretería.

Tras regresar a la vivienda de Manuel, Jorge Ignacio se desnudó para que su ropa no se manchara de sangre y se puso los guantes para no dejar huellas en las herramientas que utilizó para descuartizar el cuerpo.

Según la reconstrucción de los hechos con la confesión del presunto homicida, el día 8 de noviembre se levantó sobre las siete de la mañana para deshacerse del cuerpo. Metió tres bolsas con los restos humanos en su coche y las tiró a un contenedor en el centro de Alzira, regresó a Manuel sin parar en ningún sitio para recoger otras tres bolsas y se desplazó otra vez a Alzira para arrojarlas a otro depósito de basura en la periferia de esta ciudad. Luego volvió a la escena del crimen para coger las últimas bolsas y las tiró a un contenedor de Silla. También afirmó que se deshizo de las sierras en Massanassa.