Bajo mínimos
Cultura ·
Salas de cine cerradas, caída de visitas a museos, eventos suspendidos, rodajes imposibles y limitaciones de aforo dejan pérdidas millonarias en un sector que ha querido ver en la realidad virtual una tabla de salvaciónCultura ·
Salas de cine cerradas, caída de visitas a museos, eventos suspendidos, rodajes imposibles y limitaciones de aforo dejan pérdidas millonarias en un sector que ha querido ver en la realidad virtual una tabla de salvaciónEl escenario que el estallido de la pandemia describió en el ámbito de la actividad cultural fue inquietante. Salas de cine y teatro cerradas, librerías con las persianas bajadas, eventos musicales paralizados, museos cerrados y acumulando un descenso de visitas, editoriales sin posibilidad de dar salida a sus libros, o rodajes de cine suspendidos. Los días y las cifras que fueron llegando vinieron a confirmar los temores que desde el primer momento alimentaron los protagonistas de los distintos sectores de actividad que dan vida a la cultura y que se han visto abocados a beneficios bajo mínimos.
Publicidad
En los momentos más duros, tras decretarse el confinamiento, los primeros datos conocidos arrojaban la cifra de 600 ERTE en empresas del sector cultural. Tras esos dígitos, ya en la primavera pasada, se escondía la realidad de 3.000 personas cuyo trabajo quedaba suspendido.
Los museos estuvieron cerrados. El camino de regreso a la normalidad no parece haber recuperado el tiempo perdido. Sirva como ejemplo el dato facilitado por la directora general de Patrimonio al hablar de 65.000 visitas al San Pío V frente a las 177.000 del año pasado.
Pasaron los días y los primeros temores se trasformaron en cifras tan contundentes como las que esta semana han dado a conocer los empresarios de espectáculos al hablar de la suspensión del 95% de la actividad y pérdidas de cien millones de euros.
Antes de que estos resultados salieran a la luz ya se había constatado que todos los escenarios culturales se han resentido. Las cifras empezaron a salpicar la realidad al finalizar el confinamiento. Las librerías empezaron a abrir sus puertas tímidamente afrontando una agenda en la que anotaron un cambio de fecha para su gran cita: La Fira del Llibre, evento que se trasladó de la primavera al otoño y de los Viveros a la plaza del Ayuntamiento para finalmente suspenderse quedando en una cita digital.
600 ERTE se registraron en el sector cultural en abril
70% El volumen de negocio en las salas de cine se sitúa en el 30% respecto a 2019, según la Asociación Valenciana de Empresarios de Cine. Ello comporta un descenso del 70% en este sector.
712 empresas dedicadas a actividades audiovisuales
95% Las empresas de espectáculos y eventos de la Comunitat Valenciana han denunciado que la suspensión #unilateral de contratos por parte de las instituciones como consecuencia de la pandemia ha abocado al sector a soportar pérdidas del 95% de la facturación
10 millones de euros han dejado de ingresar los editores
43% Cuando finalizó el confinamiento se dio a conocer que el 43,5 % de las empresas del sector del libro habían solicitado préstamos del ICO para poder afrontar la situación. En ese porcentaje se incluían librerías, editoriales y también empresas de distribución.
450 pantallas de cine
9 rodajes de cine suspendidos
Editoriales Tras el parón de la actividad que supuso el confinamiento, la Associació d'Editors del País Valencia dio a conocer un estudio en el que anunciaba una pérdida del 36% de la facturación anual en un sector integrado en su mayor parte por pequeñas empresas. El porcentaje de pérdidas, encerraba una caída de 10 millones de euros.
Los libreros, que venían de una feria en 2019 con facturación de 1,1 millones y 500.000 visitantes, sabían que ese resultado era inalcanzable y se conformaron con 19.000 visitas telemáticas, medio al que no pocos -en el sector del libro y otros- se acogieron en busca de una tabla de salvación. En las bibliotecas esta apuesta, por parte del público, se tradujo en 98.00 nuevos usuarios en los servicios de préstamo digital. No pocas iniciativas optaron por el viaje virtual, o compartido con actos presenciales. Se imponía la visibilidad. La era digital ganaba razón, pero parece que no toda a juzgar por unos resultados que ya están teniendo presencia reivindicativa en la calle desdesectores como el de espectáculos.
Publicidad
Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Te puede interesar
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.