Para comer bien hay que cuidar los productos que incorporas en la cesta de la compra, que sean frescos y de temporada y tengan una buena cantidad de propiedades y nutrientes. Por eso los superalimentos se han convertido en todo un boom en la alimentación, ya que los beneficios que aportan para el organismo son todo un 'must' en la vida sana y ya forman parte de la dieta de gran parte de la población.
Publicidad
Este tipo de alimentos, que tienen propiedades nutritivas mucho más elevadas que el resto, se toman para ayudar a lograr diversos objetivos. Son esenciales en las dietas para adelgazar, perfectos para quienes quieren bajar o mantener su peso, pero también son ideales para dismunuir los niveles de colesterol o azúcar en sangre, e incluso mejorar la piel y las defensas. Cada superalimento tiene unas propiedades diferentes, por lo que sólo hay que escoger y apostar por aquel que vaya mejor con aquello que queramos mejorar.
Hay que tener claro que no son alimentos 'milagrosos' como suelen venderse, pero sí es cierto que cuentan con multitud de propiedades y beneficios por los que vale la pena incluirlos en nuestras recetas y tomar varios a diario. Entre estos 'superfoods' están las habas, cargadas de cualidades gracias a sus nutrientes y que gracias a su suave sabor y textura tienen múltiples usos en la cocina.
Para empezar, las habas son un alimento recomendado para las personas con el colesterol alto ya que no aportan nada de grasa y su consumo permite mantener controlados los niveles del colesterol LDL o malo en la sangre.
Pero si por algo son conocidas las habas es por ser un 'snack' saludable perfecto para tomar entre horas sin aportar casi calorías. Su aporte de fibra hace que sean muy saciantes y mantengan los antojos a raya, además son diuréticas y ayudan a que el organismo depure toxinas al estimular la producción de orina, reduciendo volumen corporal.
Publicidad
Además, las habas contienen una cantidad moderada de hierro, esencial para combatir la anemia. También aportan varios minerales como el potasio y el magnesio, que disminuyen la fatiga y mejoran el funcionamiento de los músculos. La cosa no queda ahí, porque también contienen fósforo, que contribuye en la formación de los huesos y los dientes.
Como decíamos, son una buena fuente de fibra, lo que además de aportar saciedad, favorece el tránsito intestinal y evita el estreñimiento. Su contenido en hidratos de carbono ayuda a controlar el azúcar en la sangre y el estrés y también son una buena fuente de proteínas vegetales, siendo una gran alternativa para quienes no quieren consumirlas de origen animal. Las proteínas, además de aportar también saciedad, ayudan a reconstruir la masa muscular tras un entrenamiento y a que el músculo aumente su volumen.
Publicidad
Recuerda que esta es información general y bajo ningún concepto sustituye el consejo de un profesional.
Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Santander, capital de tejedoras
El Diario Montañés
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.