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Para adelgazar no hay una fórmula exacta que vaya a dejarte los resultados que esperas en poco y tiempo, y mucho menos sin esfuerzo. Cada persona lleva un proceso diferente a la hora de bajar peso y por ello es importante que se haga con la ayuda de un profesional que pueda orientarnos sobre buenas pautas alimenticias y hábitos para nuestro caso. Lo que es esencial, sí o sí, es llevar una buena alimentación y hacer deporte al menos dos o tres veces por semana. Una vez pones estos pilares básicos en marcha, puedes optar por incorporar complementos como las infusiones que te ayuden a tener un empujón extra a la hora de conseguir tus resultados.
No son productos milagrosos, pero sí que ayudan a saciar el hambre y mantener a raya los antojos durante el día, además de ser un sustituto perfecto para postres dulces si las tomamos después de comer o cenar. Tienen muchos beneficios añadidos, que varían en función de sus ingredientes, y por eso han sido empleadas durante años en la medicina tradicional. Su ingesta habitual deja unos beneficios en el organismo a largo plazo y crean un hábito muy saludable para relajarte y calentar el cuerpo.
A la hora de bajar de peso resultan una opción muy efectiva, ya que con su poder diurético y detox se encargan de eliminar toxinas y líquidos del organismo, evitando la retención de los mismos y ayudando a adelgazar visiblemente y reducir volumen corporal. Puedes optar por tu favorita entre un gran abanico de opciones que encontrarás en supermercados y herbolarios a un precio muy económico. Algunas incluso puedes hacerlas a tu gusto en casa, combinando diferentes ingredientes. Una de las que puedes hacer es la clásica tila con limón, una opción que sigue siendo un imprescindible por mucho tiempo que pase.
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El toque de limón aporta vitamina C y convierte esta bebida en un aliado antioxidante para combatir el envejecimiento y los efectos nocivos de los radicales libres, que afectan a la oxidación celular y la aparición de enfermedades cardiovasculares. Estos antioxidantes también son muy importantes para fortalecer el sistema inmunitario y mejorar las defensas, teniendo el cuerpo mejor preparado para responder ante virus y contagios. A nivel estético, el limón ayuda a iluminar la piel, que se muestra más despejada, flexible y libre de manchas, reduciendo pequeñas líneas de expresión.
El limón también hace que esta infusión sea un potente quemagrasas ya que acelera el metabolismo, favoreciendo que el cuerpo consuma las calorías ingeridas para producir energía en lugar de almacenarlas como grasa. Por otra parte, la tila es una buena opción para aliviarnos en épocas de estrés y ansiedad ya que ayuda a relajarnos y facilita el desanso. Además, mejora las digestiones y contribuye a evitar poblemas tras las comidas como la acidez o pesadez estomacal.
Para preparar esta infusión basta con poner una bolsita de tila en 250 ml de agua caliente y añadir un poco de zumo de limón al gusto. Deja reposar un par de minutos y tómala en cualquier momento del día. También puedes elaborarla en una olla, añadiendo al agua una cucharadita de esta hierba, el zumo de limón e incluso su cáscara para que emulsione bien todas las propiedades. Espera a fuego lento a que llegue a ebullición y después deja reposar y filtra la mezcla.
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