A veces llevar una buena alimentación no es suficiente para que tu salud esté lo mejor posible ni para conseguir una buena forma física. Porque además de cuidar lo que comes es fundamental hacer deporte y prestar atención a otro aspecto que se suele descuidar bastante, qué bebemos. Es habitual pensar que al ser líquido, las bebidas que tomamos no engordan ni afectan tanto en nuestra salud como puede hacerlo la comida, pero la realidad es que lo hacen y mucho.
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Por ejemplo, comer con refrescos en vez de con agua no solo no aporta la suficiente hidratación, sino que no son tan depurativas para el sistema renal y suponen un aporte de calorías extra que puede llegar a ser muy elevado. Esto, lógicamente, es contraproducente a la hora de bajar de peso y puede contrarrestar los efectos de una dieta ligera, además del elevado aporte de azúcar en sangre, que se traduce en más antojos durante el día.
Por ello, además de dejar de lado el consumo habitual de refrescos azucarados, se puede incorporar las infusiones a la rutina, una forma muy saludable de tomar agua y a la vez llevarte unos beneficios extra al organismo. Puedes tomar una o varias al día y además de hidratarte te ayudan a mejorar la digestión y depurar el cuerpo. Hay un montón de ingredientes con los que las puedes preparar, que además se pueden comprar en cualquier supermercado o herbolario.
Una de las que puedes probar es la infusión de boldo y limón, una bebida con propiedades digestivas y hepatoprotectoras que ayuda a evitar molestias tras las comidas, como la hinchazón o la acidez. Además el toque de limón le aporta propiedades antioxidantes que fortalecen las defensas y ayudan a combatir los efectos nocivos de los radicales libres, causantes del envejecimiento del organismo y la aparición de enfermedades cardiovasculares.
La infusión de boldo y limón también aporta propiedades antiinflamatorias, que calman dolores como el menstrual, de cabeza o de articulaciones, además de reducir la inflamación estomacal. A esto se le suma sus propiedades carminativas, que ayudan a expulsar los gases del cuerpo y resulta un alivio para las personas que padecen hinchazón o tienen un tránsito intestinal lento.
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Por otra parte, el limón acelera el metabolismo, por lo que la infusión ayuda a perder peso al favorecer la quema de calorías y la reducción de la grasa corporal, además de ser una opción saciante perfeta para sustituir un postre dulce y evitar caer en antojos ultraprocesados. Y si te cuesta conciliar el sueño, tomar esta infusión antes de dormir te ayudará a descansar mejor, además de ser relajante y muy buena para combatir el estrés o la ansiedad.
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