La senda Cavanilles, un impresionante camino en el macizo del Caroig

En el interior de la provincia de Valencia se encuentra uno de los parajes naturales más relevantes de la Comunitat: el macizo del Caroig. Se trata de un extenso recorrido delimitado por el valle de Ayora, la Canal de Navarrés y la Muela de Cortes, que llega a superar los 2.350 kilómetros cuadrados de extensión.

La Muela de Cortes alberga uno de los senderos más bonitos de la región: la senda de La Cortada o la senda Cavanilles (SLV-13). Un impresionante camino de herradura que se sumerge en las paredes del cañón del río Júcar y que bordea precipicios de considerable altura, dotándole así de una gran verticalidad.

Un recorrido circular de 8 kilómetros y medio, que se puede llevar a cabo en, aproximadamente, tres horas y media. Está considerada como una de las mejores rutas que ofrece el municipio, tanto por sus panorámicas casi verticales, como por las vistas al embalse y al río Júcar.

El camino se inicia en la misma localidad de Cortes. A través de la senda, se puede ascender hasta la parte más alta de la Muela, junto al depósito.

Es recomendable hacer esta ruta siguiendo el sentido de las agujas del reloj, es decir, al llegar al punto donde se bifurca el camino, conviene girar a la izquierda.

El trazado, al estar catalogado como Sendero Local, está perfectamente delimitado por marcas verdes y blancas. Así, en el inicio de la ruta se encuentra un poste que señaliza claramente con estas marcas el arranque de la senda local SLV 13.

Al comenzar el camino, se deja a un lado una balsa de riego que servirá como referencia para saber que se ha tomado la dirección adecuada.

Todo el camino está marcado por una cuesta que alcanza los 400 metros de desnivel, que no desaparecerá hasta llegar al punto más elevado, en La Cortada. Por ello, se recomienda mantener un ritmo tranquilo para disfrutar de este maravilloso paraje.

Unos metros más hacia delante, vuelve a aparecer un poste que señaliza la subida a través de la senda Cavanilles, tomando el camino de la izquierda.

A partir de este momento ya se disfrutará de unas impresionantes vistas protagonizadas por el cañón del río Júcar, el municipio de Cortes y su viaducto y que son agradablemente acompañadas por el aroma del romero y el brezo.

Uno de los puntos álgidos de la ruta se localiza en el paso de La Cortada, desde donde se puede observar el Castillo de Chirel, una antigua fortaleza morisca que sirvió para custodiar el río desde su atalaya.

Una vez alcanzado el final del depósito de La Muela, aparece un panel informativo que indica un desvío a la derecha para continuar con el itinerario y que conduce hacia el Paso de La Franca. A partir de este desvío hay que prestar más atención a las marcas del sendero, que ya no son tan evidentes.

El paisaje que asoma a esta altura es fabuloso: el excursionista se halla solo en medio de la nada, en pleno macizo del Caroig, con la única compañía del sonido del viento. A partir de ahí, comienza el descenso con vistas a 'La ventana del águila', que acompañarán la visita casi hasta llegar a la orilla del arroyo, la cual hay que seguir hasta alcanzar el puente para cruzar a la otra orilla.

Llega el momento de finalizar la ruta en dirección a la localidad de Cortes de Pallás. A la vista está el cambio que se produce en el paisaje, en el que pinos y plantas aromáticas ceden el protagonismo a los campos de cultivo.

8,5 kilómetros de ruta circular. La senda Cavanilles es la propuesta perfecta para sumergirte en unas espectaculares vistas de la naturaleza en un enclave que te hará sentir que estás en otro mundo.